La Enfermería madrileña ha recordado este viernes a la Comunidad de Madrid su obligación como administración para establecer las medidas necesarias para garantizar la seguridad de estos profesionales en el desempeño de sus labores frente a la viruela símica o viruela del mono.
El Colegio de Enfermería de Madrid (Codem) ha insistido en la mejora de diagnóstico, el rastreo y seguimiento de casos y, en cualquier caso, apuesta por la prevención, la prudencia y por el tratamiento, todo ello «eliminando cualquier estigma que pueda llevar asociada la enfermedad».
La Comunidad de Madrid, con unos 2.000 casos confirmados de monkeypox, es la región que más positivos acumula y, según el Codem, las enfermeras están volcándose una vez más con el cuidado de los pacientes diagnosticados, en el proceso de vacunación puesto ya en marcha y trabajando en acciones de educación para la salud y prevención en los centros de salud.
«Sin embargo, este trabajo en primera línea debe ir acompañado de las medidas de seguridad necesarias que garanticen en todo momento la salud de las profesionales», han recordado desde la institución colegial.
En este contexto, desde el Codem han exigido que se cumplan esas medidas y los protocolos existentes con el «único e innegociable objetivo» de lograr cero contagios entre las enfermeras y resto de profesionales sanitarios.
«Los centros de trabajo (públicos y privados) son quienes deben facilitarles tanto los equipos de protección como la formación e información actualizada necesaria para prestar unos cuidados de calidad acordes a la situación de cada momento», ha subrayado.
En esta misma línea, la institución ha recalcado que la pandemia de Covid-19 «ha dejado clara la importancia» de proteger «a quienes cuidan de los ciudadanos y, aunque salvando las distancias, no pueden volver a cometerse los mismos errores».