Más Madrid ha propuesto este martes formación a las fuerzas policiales, pruebas en centros sanitarios y hospitales y campañas de concienciación en discotecas en la Comunidad de Madrid, entre otras medidas, tras el «auge» de pinchazos para sumisión química como nueva forma de agresión sexual en locales de ocio nocturno.
Según ha indicado el partido en un comunicado, el objetivo de los procesos de formación a profesionales de la Policía Municipal de Madrid es evitar «juzgar a las mujeres» que denuncian haber sido pinchadas. Además, las campañas de concienciación pretenden disminuir e informar dentro de los locales como bares o discotecas sobre cómo actuar ante un caso.
La portavoz de Más Madrid, Mónica García, ha incidido en declaraciones remitidas a los medios que Madrid no se puede quedar «a la cola ni se puede quedar de brazos cruzados» en proteger a las mujeres ante el «aumento» de casos.
Así, ha recalcado la «urgencia» de estas tácticas, «especialmente en unas semanas con tanta actividad nocturna, como son las vacaciones y las verbenas de agosto» donde se congregan multitudes de personas.
El grupo político ya había pedido con anterioridad --en el pleno de la Asamblea del 16 de diciembre de 2021-- una estrategia que incluyera estas agresiones. Así, ha calificado esto como una herramienta de prevención ante posibles agresiones al protocolo, «una declaración firme de intenciones». «El ocio y la noche también son nuestras», ha zanjado.
"la comunidad no dispone de datos"
Por su parte, la portavoz de Igualdad de Más Madrid, Cristina Castillo, ha afirmado que la Comunidad no dispone de datos sobre sumisión química. Tampoco ha implantado, a su juicio, «ninguna medida concreta» para poner fin a esta forma de violencia sexual.
Al hilo, García ha incidido en que estas tácticas generarían «tranquilidad a todas las madrileñas».
El partido líder de la oposición ha comparado con otras regiones, como Cataluña, que ya dispone de medidas específicas contra la sumisión química. Además, la portavoz ha echado en falta un plan actualizado, ya que «el último protocolo» es de hace cuatro años.