La consejera de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura, Paloma Martín, ha censurado este martes las medidas impulsadas por el Gobierno de Pedro Sánchez para el ahorro energético y se ha preguntado si Moncloa ha realizado un estudio de impacto económico de las mismas sobre sectores como el comercio, el turismo o la actividad nocturna.
«El Gobierno de España actúa una vez más en perjuicio de los ciudadanos, que ven como la factura de la luz sigue creciendo y estamos batiendo récord histórico. Pero es que también se hace en contra de la economía española y madrileña», ha lamentado durante una visita a la remodelación que el Ejecutivo regional ha realizado en la Laguna de San Juan, ubicada en el término municipal de Chinchón.
Entre otras cuestiones, la consejera se ha preguntado si Moncloa cuenta con algún estudio sobre el impacto económico que las medidas de ahorro energético pueden tener sobre el comercio, sobre el turismo, sobre la actividad nocturna y, en esta línea, ha recordado que «el comercio y la administración pública solo representan el 13% del consumo de gas en España».
«Necesitamos políticas serias porque la política energética que está desarrollando el Gobierno de España nos lleva a que estemos pagando hoy la factura de la luz más cara, a que la industria haya paralizado ya en parte la producción de sus productos, precisamente por el alto coste de la energía que tenemos en estos momentos», ha añadido.
Frente a ello, ha recordado las propuestas planteadas por el Gobierno de la Comunidad para rebajar el recibo de la luz y ante las que ha dicho que «a día de hoy» no han tenido respuesta. Así, ha recordado la supresión de ocho impuestos que están grabando la luz, que determinados costes se puedan llevar a los Presupuestos Generales del Estado o que se abra un debate profundo sobre la necesidad de mantener las centrales nucleares y de mantener su vida útil.
«Lo que no podemos tolerar es que el dogmatismo ideológico de este gobierno suponga una escalada de precios que merma la competitividad de las empresas y el poder adquisitivo de las familias», ha zanjado.