Representantes de todas las comunidades autónomas están llegando desde primera hora de este viernes al Palacio de Artaza de la localidad vizcaína de Leioa, que acoge la CARUE, Conferencia para Asuntos relacionados con la Unión Europea, y que preside la ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez.
En un encuentro preparatorio de cara a que España asuma la presidencia de la UE en el segundo semestre de 2023, la CARUE se celebra, por primera vez, fuera de Madrid. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, propuso que Euskadi acogiera en esta ocasión esta reunión, al Lehendakari, Iñigo Urkullu, que aceptó.
Isabel Rodríguez está acompañada, en la cumbre, por el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares. La consejera de Gobernanza Pública y Autogobierno, Olatz Garamendi, ejerce de anfitriona del evento, al que asisten los consejeros competentes en asuntos europeos de todas las comunidades autónomas.
Garamendi y el delegado del Gobierno en el País Vasco, Denis Itxaso, les reciben y saludan a su llegada al Palacio de Artaza. Posteriormente, ministros y consejeros se han hecho la foto de familia antes de celebrar la reunión para abordar los retos en el contexto europeo.
Reunión sobre competencias
Tras la cumbre, que comienza a las 9.30 horas, y se prevé que se prolongue durante tres horas aproximadamente, con la intervención de todos los participantes, se celebrará un encuentro bilateral entre la ministra de Política Territorial y la consejera vasca de Autogobierno, Olatz Garamendi, para hablar de las competencias pendientes de transferir a Euskadi.
Esta cita se desarrollará a instancias de la consejera, que la solicitó tras el malestar generado por las declaraciones del presidente, Pedro Sánchez, durante el pasado debate del estado de nación, en las que aseguró que no eran transferibles cuatro de las competencias solicitadas por el Ejecutivo vasco: Meteorología, Fondo de Cinematografía, Gestión del Litoral y Autorizaciones iniciales de trabajo para personas migrantes.
La titular vasca de Autogobierno remitió, a principios de año, la propuesta para negociar estos traspasos --al que posteriormente sumó el de Salvamento Marítimo-- ante, según explicó, la ausencia de movimientos del Ejecutivo central para cumplir el cronograma de negociación de transferencias propuesto por la Administración del Estado y aceptada por el Gobierno Vasco.
Tras las palabras de Sánchez, que luego han matizado voces socialistas, el propio Lehendakari, Iñigo Urkullu, denunció que el Gobierno de España es "renuente a cumplir el Estatuto". El Ejecutivo autonómico ha insistido, además, en que no aceptará que el Gobierno central decida, de forma unilateral, qué competencias son transferibles o no.
Está será previsiblemente la postura que mantendrá Garamendi en su reunión con Rodríguez. El Gobierno Vasco defiende que todas las transferencias, incluidas las cuatro que Pedro Sánchez calificó de "no transferibles", están previstas en el Estatuto de Gernika y en el cronograma planteado por Ejecutivo de Sánchez a principios del 2020.