El exconseller y diputado de Junts en el Parlament Lluís Puig, que reside en Bélgica, ha puesto en valor que la Mesa del Parlament haya adoptado una "posición contundente" para mantener su delegación de voto que el Tribunal Constitucional (TC) había anulado, y se ha ratificado en su decisión de no dejar el acta.
"Me presenté a las elecciones para hacer presente el exilio y nuestra represión. No sé qué pasará, pero para dejar el escaño tendría que pasar algo que me hiciera pensar que no vale la pena continuar esta lucha", ha afirmado en una entrevista este jueves del 'Punt Avui', recogida por Europa Press, en la que también ha celebrado la unidad del independentismo ante la decisión del TC.
Ha defendido que desde el Parlament "se está haciendo todo" para mantener su delegación de voto --que ha continuado aceptando su voto a pesar de no aparecer en pantalla-- y ha destacado el papel de la presidenta de la Cámara, Laura Borràs, en este asunto.
"Tiene mucho valor en el caso de los tres partidos (ERC, Junts y la CUP), pero más en ella, porque está bajo el punto de mira judicial y se le pueden acumular demandas, causas o juicios", ha detallado.
Puig ha insistido en la necesidad de que se mantenga su delegación de voto ya que, según él, la justicia belga dice que si entra a España y es juzgado se le vulnerará la presunción de inocencia y no tendrá un juicio justo: "Esto tendría que ser argumento justificativo suficiente para mi no presencialidad".
Borràs
Preguntado por la causa judicial contra Laura Borràs cuando era directora de la Institució de les Lletres Catalanes (ILC), ha sostenido que "la cuestión de los contratos es una práctica normalísima en todas las instituciones públicas" y, por ello, lo ve como un caso político.
"Si quieren encontrar, encontrarán lo que haga falta, porque es una causa politizada; el sistema judicial del Estado es un escándalo", ha lamentado, y, al no advertir corrupción, ha considerado que la permanencia de Borràs en el cargo no perjudica la imagen del Parlament.
Respecto a la continuidad del Govern de ERC y Junts, ha pedido un "giro espectacular" antes de alcanzar la mitad de la legislatura y se ha remitido al pacto de gobierno.
Tjue y euroórdenes
Sobre si el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ratifica las conclusiones del Abogado General sobre que la Justicia belga no puede rechazar la entrega de los encausados por el 1-O, reclamados por el magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena, Puig ha considerado que esto implicaría que "habría un aval para poder hacer una nueva petición de extradición".
De todas maneras, ha avisado de que esto habría que ver cómo lo encara Bélgica, ya que "ha juzgado y no ha renegado en ningún momento de la sentencia ni en primera instancia ni en segunda", en referencia a las diferentes decisiones de triunales belgas de no entregar a Puig.
"Hay muchos otros argumentos que servirían para defender la no extradición. Me lo tomo todo entendiendo que lo que buscan es que no se repita de cara a Puigdemont, Comín y Ponsatí en el momento en el que se les resuelva el caso de la inmunidad. Soy caza menor y lo que buscan es la caza mayor, con el presidente Puigdemont", ha zanjado.