La Guardia Civil ha detenido a seis personas en Barcelona por presuntamente robar cables de alta tensión en las vías férreas de Girona, Barcelona, Tarragona, Lleida, Castellón y Valencia, la mayoría en el Corredor Mediterráneo.
Según un comunicado de este martes, los daños causados ascienden a los 360.000 euros y han supuesto pérdidas de más de tres millones de euros, puesto que provocaron desvíos de trenes, atrasos y cierres de estaciones.
La investigación se inició en enero, y la instrucción judicial la ha llevado a cabo el Juzgado de Instrucción 4 de Sagunto (Valencia) y ha concluido con el ingreso en prisión para cuatro de los detenidos.
Modus operandi
Así, han desmantelado un presunto grupo, en el que cada uno de los integrantes tenía "un rol muy específico": cuatro de ellos pasaban tres días en la zona donde iban a ejecutar el robo y los otros dos mantenían contacto telefónico desde Barcelona en tiempo real mientras se producían los hechos.
Los cuatro autores materiales del robo dejaban sin tensión uno de los cables que aportaban la energía necesaria para el funcionamiento de los trenes, y lo hacían de manera que la empresa encargada de la red no detectaba la falta de tensión.
En un mismo robo llegaban a sustraer más de 800 metros de cable --unos 2.500 kilos de carga--, que enrollaban en tramos de diez metros después de cortarlo con una herramienta fabricada especialmente para ello.
Transportaban el material en vehículos de gran tonelaje y, en ocasiones, lo escondían en naves cercanas a los hechos y en días posteriores procedían a su traslado y venta final.
Se les atribuyen más de 31 delitos de robo con fuerza, robo y uso de vehículos a motor, quebrantamiento de condena y delitos continuados contra la seguridad vial.