Los sanitarios del Samur-Protección Civil atendieron a 560 personas durante las fiestas del Orgullo LGTBI, 5 de ellas graves; mientras que la Policía Municipal de Madrid detuvo a 11 personas por diferentes vómitos, pero ninguno de gravedad.
Así lo ha indicado este mediodía la concejala delegada de Seguridad del Ayuntamiento, Inmaculada Sanz, que señala que el balance general en materia de seguridad de este celebraciones es "positivo", sin incidentes reseñables, teniendo en cuenta la gran cantidad de público.
De las atenciones del Samur, del total, 321 fueron el día grande, del sábado. De los asistencias de todos los días, 58 necesitaron ser trasladados al hospital, 5 de ellas graves, 3 por drogas, 1 por dolor torácico y el último con un código infarto.
Por su parte, la Policía Municipal arrestó a 11 personas, levantó 29 denuncias por vulneración de ordenanzas municipales, 58 actas por venta ambulante, formuló 39 pruebas de drogas positivas al volante, 11 denuncias en base a la Ley de seguridad ciudadana, 14 denuncias por ruido, además de realizaron las correspondientes mediciones por posible contaminación acústica.
Sanz también dio un pequeño balance sobre el festival Mad Cool. EN este caso hubo 14 asistencias por parte del Samur, algunas denuncias por contaminación acústica, 2 detenidos por conducir sin carné, 12 por botellón y otros 12 por consumo de drogas.
UN ORGULLO "EN POSITIVO"
La delegada municipal de Seguridad también ha comentado que el escenario más concurrido fue este año el Plaza España, pero que contaba con vías de evacuación muy amplias, y que estaba perfectamente aforado y controlado por drones.
También ha revelado que la Policía Municipal tuvo que desalojar algunos días las plazas de Chueca, Zerolo, Vara del Rey, en algún caso con algún detenido; "pero han sido cuestiones puntuales sin incidentes graves".
"Todos los escenarios han funcionado bien en condiciones de seguridad, a pesar de algunas polémicas artificiales como lo ocurrido con la Plaza del Rey, porque había informes de Policía y Bomberos que así lo avalan que no se pusiera allí. Todos los escenarios han funcionado bien en condiciones de seguridad, que es por lo que tenemos que velar en el Ayuntamiento de Madrid", ha recalcado.
La edil ha reconocido también que se han producido denuncias y llamadas de vecinos por ruido tanto en el Orgullo LGTBI como en el Mad Cool, por lo que los técnicos realizaron los correspondientes estudios de medio ambiente, "y de ahí se tendrá que ver si se ha producido superación de límites y de ahí si hay sanción o no".
"Lo más importante es que se ha producido disfrutar un Orgullo como todos los años. Siempre que hay aglomeración hay incidentes, pero en general positivo", ha concluido Inmaculada Sanz.