Salut perfila el primer servicio público de alergología de las Islas, una demanda histórica de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEIAC) que nunca, hasta ahora, lo había visto tan al alcance. Y es que la inequidad del servicio respecto al resto del territorio nacional clama al cielo. Balears tiene a una única especialista en la red pública para toda la población, cerca de un 1.200.000 personas, cuando lo óptimo según la Organización Mundial de Salud sería uno para cada 50.000, es decir, en las Islas tendría que haber unos 24.
La labor de la SEIAC, de la mano de su delegación balear, ha sido determinante, llevan diez años insistiendo a los diferentes Governs en la necesidad de crear este servicio. «Hemos tenido una reunión con Eugenia Carandell (directora asistencial del IB-Salut) y Carmen Sanclemente (directora médica de Son Espases) y estamos en el momento más cercano», explica el presidente de la sociedad, Antonio Valero, que este fin de semana ha participado en el congreso Alergomenorca. Y efectivamente, Salut confirma que se empieza a trabajar en ello y que Son Espases, será el lugar indicado. «El siguiente paso es saber las características que tendrá», explica el doctor Valero. «Nosotros hemos hecho una propuesta sobre cómo abordarlo porque para tener un servicio mínimo, en función del nivel presupuestario, debería nacer con cinco profesionales, podría implementarse en dos años», aunque «la sensación es que es más difícil iniciar, que consolidar».
Representantes de la SEIAC se reunieron hace tiempo con los grupos parlamentarios de Balears para exponer la problemática y el pasado 3 de marzo se aprobó una iniciativa por unanimidad en la que se pedía al Govern implantar este servicio «porque la necesidad es imperiosa y la injusticia social también». Como se recordará Balears es la única comunidad que no cuenta con esta unidad específica. Antonio Valero explica que el próximo mes de octubre se celebra en Palma el congreso de especialistas donde ya «espero que podamos agradecer la ocupación y la implementación del servicio de alergología», señala. Y es que, hoy por hoy, quien tenga una alergia tiene pocas más opciones que visitar a uno de la docena de especialistas que trabajan en la sanidad privada y «hemos visto a madres pagando un dineral de su bolsillo».