¿Nota más cansancio de lo habitual? ¿Le cuesta afrontar sus rutinas? En esta época del año mucha gente siente un estado de debilidad generalizado, «hacer el mínimo esfuerzo cuesta, hay fatiga física e intelectual, no es fácil concentrarse, tener memoria...». La farmacéutica Aina Bordoy define los síntomas de la astenia primaveral, una alteración general del estado de ánimo que afecta a buena parte de la población, sobre todo a la franja de edad de entre los 20 y 50 años, y de forma más habitual a mujeres o a alérgicos.
«Hay también una alteración del sueño que se suele atribuir al cambio de hora», recuerda la especialista de la Farmacia Bonnin de Palma. «El hecho de que haya más tiempo de luz, hace que estés más activo, hagas más planes y te vayas a dormir más tarde ya que se altera la producción de melatonina», añade sobre los cambios de rutina en una época del año en la que, además, sube la temperatura y la presión atmosférica.
¿Más síntomas de la astenia primaveral? «Hay una pérdida de apetito, mucha gente pierde peso porque se le altera el hambre», indica Bordoy. «También baja también la líbido, estás desganado, irritable, con dolor de cabeza o estrés...».
En realidad es una cadena de afectación en la que todo influye. El periodo suele durar unas dos semanas y es como todo, «en caso de alargarse hay que acudir al médico porque puede haber una patología de base», añade.
Y ¿qué hacer cuando esto pasa? ¿Se puede tratar? En la farmacia recomiendan que, si los síntomas se salen de lo normal, vayan a hacerse una analítica. «Muchas enfermedades pueden dar síntomas similares como una anemia, hipotiroidismo… Si es algo leve es astenia pero si afecta mucho es mejor mirarlo bien», recomienda la especialista.
Pero para la astenia primaveral lo mejor es un complemento alimenticio adaptado a los síntomas de cada persona. En estos momentos, «están muy de moda los adaptógegos que estimulan el sistema nervioso y favorecen el rendimiento físico e intelectual. Te adaptan un poco a tu día a día», comenta Aina Bordoy.
Frente a las voces que alertan sobre el exceso de vitaminas o la falta de control en su consumo. «No es perjudicial», tranquiliza la farmacéutica, «siempre que se haga con medida y cuidado», añade. «Hay gente que se toma 12 cosas por la mañana y 12 por la noche, y hay que valorar todo, sin excesos».