Llorenç Perelló fue de nuevo elegido como alcalde de Alaró en los últimos comicios locales de 2023. Su gestión se ha centrado en este año en seguir con los proyectos iniciados y desarrollar toda una nueva batería de medidas para hacer que la localidad siga mejorando día a día. En estas lineas repasa lo logrado y todo lo que queda por delante para un municipio con las peculiaridades de Alaró.
–¿Cómo definiría esta legislatura?
–Sin duda se trata de una legislatura continuista, ya que hay puestos en marcha muchos proyectos, pero también será un periodo lleno de desafíos. Esperamos que todos estos retos que tenemos por delante tengan reconocimiento y apoyo por parte del Govern de les Illes Balears, un factor que ya estamos viendo en forma de subvenciones. Podríamos mencionar las que se nos han facilitado por ejemplo para un ámbito como la reactivación turística, procedentes de fondos Next Generation. Por primera vez disponemos también de fondos procedentes del Impuesto de Turismo Sostenible.
–¿Puede concretar alguno de estos proyectos?
–Uno de los principales es el de poder conectar el agua de Ses Artigues a la red pública del pueblo. Tenemos ultimados ya todos los detalles y esperamos adjudicar las obras antes de final de año y que ya sea una realidad durante 2025. Las obras estarán financiadas íntegramente por este impuesto de turismo sostenible antes mencionado. También son muy importantes las iniciativas para proteger el medio ambiente. Un buen ejemplo es la adquisición de dos nuevos vehículos eléctricos para la flota municipal. También hemos podido mejorar varias infraestructuras como el polideportivo o ampliar el equipamiento del cuerpo de Protección Civil. En cuanto a la cultura, que es un asunto muy importante para Alaró, nos podemos felicitar por una nueva edición del festival Alart, que no deja de crecer y consolidarse, además de ser un claro exponente de la riqueza de ese sector en el pueblo.
–¿Con qué escenario se está encontrando el equipo de gobierno en estos primeros meses de andadura?
–Han sido meses de poner la legislatura en marcha, así como el nuevo equipo municipal. Estamos encontrando muchas facilidades y todas las puertas abiertas en lo que respecta a nuestra relación tanto con el Consell de Mallorca como con el Govern de les Illes Balears.
–¿En qué ámbitos se pone de manifiesto esta buena sintonía con las instituciones supramunicipales?
–Se nota en cosas muy positivas como por ejemplo en el aumento de las subvenciones en el Pla d’Obres i Serveis, que permite llevar a cabo iniciativas como el Pla de Ombres, las obras de la nueva zona verde de la que disfrutará el pueblo, los trabajos de mejora en algunas zonas de los Damunts. Desde el Govern la llegada de esos fondos procedentes del Impuesto de Turismo Sostenible harán posible poder atender un tema tan importante como es la optimización del ciclo del agua, que permitirá aprovechar al máximo este valioso recurso.
–¿Cómo se afrontarán los próximos tres años de trabajo muncipal?
–Se afrontarán haciendo política a pie de calle. Todos los regidores y regidoras están esforzándose para ello. Asisten a todos los eventos que se realizan en el pueblo, sea del tipo que sean. Prestan atención a las opiniones de los vecinos, escuchan sus necesidades y muestran interés por conocer sus problemas o sus sugerencias. La clave de nuestra política es escuchar y ser cercanos.