Con 21 años de andadura, Iceberg se ha consolidado como una de las heladerías más reconocidas de España, ocupando el quinto lugar en el ranking nacional y el puesto 76 en el World Ranking del Gelato Festival World Masters. Este torneo, que se celebra cada cuatro años en Italia, reúne a los mejores heladeros del planeta, convirtiéndose en un escaparate de la excelencia en el arte de la heladería.
La historia de un amor
Iceberg no es solo una heladería, es el resultado de la pasión y dedicación de su fundador Carlos Enríquez, un consultor empresarial, aficionado a los helados, que decidió cambiar de profesión en el año 2002. Con el tiempo, su amor por los helados se transformó en una verdadera vocación, llevándolo a formarse como maestro heladero mientras buscaba el sitio perfecto para montar su negocio.
Fue en el año 2003 cuando eligió Mallorca para incursionar en un mercado poco desarrollado en ese entonces. En una entrevista reciente, Enríquez recuerda ese momento: «en toda Palma solo existían dos heladerías que hoy ya no están. En el casco antiguo, donde no paran de circular turistas, no había heladerías. Así, encontré un local asequible muy rápido y abrí en el casco antiguo de Palma la primera heladería».
Desde entonces y hasta la fecha, no han parado de crecer. Con cuatro heladerías en Palma y más de treinta puntos de venta repartidos en toda la Isla, Iceberg es una fábrica de helado artesano con capacidad de producir alrededor de 3.000 litros de helado diariamente. Además, sus deliciosos helados también están presentes en el sector Horeca, supermercados de Mallorca, y en el norte de Alemania.
Sabores con historia
Helados y sorbetes artesanos en estado puro, elaborados con frescos productos locales y de temporada, son la piedra angular de Iceberg. Esto no solo garantiza la frescura de cada sabor, sino que también apoya a los productores locales y promueve la sostenibilidad. Cada tentadora creación es una celebración de los sabores auténticos de la Isla.
La carta de Iceberg es un viaje sensorial que invita a explorar una muy extensa variedad de helados elaborados con leche y nata fresca, y sabrosos sorbetes de fruta fresca natural, sin lactosa y veganos. Desde los sabores clásicos, hasta combinaciones innovadoras como el helado de chocolate negro y chile, o el sorbete de naranja de Sóller con hierbabuena, con el que resultaron finalistas en el Gelato World Tour 2013.
En palabras de Enríquez, «es un sorbete sencillo, creado en 2010, y elaborado con una materia local muy especial, que representa muy bien el camino recorrido, siempre con el objetivo puesto en la importancia de no dejar nunca de crear, de mejorar y de ser competitivo». Carlos y su equipo le ofrecen una experiencia única en cada bocado. ¡La magia del helado artesano le espera en Iceberg!