Entre el viernes 21 y el domingo 23 se celebrará en Santa Eugènia la XLI edición de la Fira Agrícola i Ramadera. Entre las actividades que recoge su programa destaca como gran novedad la vuelta de una de citas más clásicas, que no se celebraba desde 2019, el Concurs d’Aviram. La Fira de Santa Eugènia sigue manteniendo, en esta edición ya por fin con plena normalidad, su carácter abierto y colaborativo, en la que todos los sectores y colectivos implicados aportan su dedicación para que sea, como cada año, un éxito.
El viernes arranca el programa con la representación de Trot, un espectáculo de danza y circo a cargo de la compañía Manipulats. El sábado desde las 10 de la mañana, en el aparcamiento de la calle Josep Balaguer, tendrá lugar la inauguración del ya mencionado Concurs d’Aviram de les Illes Balears, que llega este año a su XVIII edición, junto al VI Concurs Internacional d’Avicultura. Tendrá horario de visitas de 10 a 13 horas y de 16 a 19.30 el sábado, y de 9 a 14 horas el domingo. En su desarrollo se incluirán además los monográficos sobre el colom nas de xot, el colom de pinta, el colom gavatxut, el colom de casta grossa y la gallina menorquina.
Por la tarde será la fiesta infantil de la mano del grupo Spaguetti, a las 17 en la plaza Bernat de Santa Eugènia. A las 18 horas se inaugurará la exposición de macramé y bordados de la Associació de Mestresses de Casa y después El Betlem a Santa Eugènia; Més enllà del Temps i de l’espai, de Sheona Smith y Sheree Murphy y Tradició i Abstracció, de Tomeu Bauçà y Sebastià Bauçà, todas ellas en el Centre Parroquial.
Ya para el domingo se reserva el plato fuerte, con la apertura a las 8 de la mañana de la XLI Fira de Santa Eugènia. En ella se podrá disfrutar de las muestras de ganado, artesanía, maquinaria agrícola y coches y motos antiguas. Como complemento se ha organizado también una ludoteca infantil, la actuación de la Batucada Binicada o el baile popular con Mata Escrita. Cerrarán la jornada las representaciones de El capità Òscar i el seu grumet Fede a la recerca del tresor, de Circo Stromboli y el teatro familiar con la obra Una flor no fa estiu. Se pondrá fin así a una feria muy tradicional y que con una normalidad plenamente recuperada, quiere volver a ser un buen ejemplo de participación y esfuerzo común.