Alaró vuelve a vivir en sus calles este domingo una nueva edición de la Fira Gremial. Tras dos años de restricciones, esta XXIII edición supone el regreso de las artesanos y sus habilidades a las calles del pueblo, un hecho muy valorado por el alcalde, Llorenç Perelló y la regidora de Fires, Mari Cabañero. De nuevo todas las calles del centro del pueblo mostrarán los oficios artesanos agrupados por zonas, como hace siglos lo hicieran los gremios. Productos agro-alimentarios, muestras de flores y plantas, artesanos de joyería, barro, tejidos, madera o piel llenarán con una atmósfera especial el domingo 2 de octubre, en el que más de 90 puestos ofrecerán sus productos exclusivos.
«La fira será también una oportunidad para conocer el trabajo que desarrollan nuestras empresas locales» afirma Perelló, «así como también promocionará la gastronomía local gracias a la Mostra de Cuina, que este año se hará en la Plaça del Mercat». En esta Mostra estarán presentes diez restaurantes, tres bodegas y un productor de cerveza artesana.
Otro punto fuerte de Gremial es, según Perelló, «su amplio contenido cultural». El programa incluye cinco exposiciones tanto colectivas como individuales diferentes, que darán buena fe de la gran actividad en ese terreno del municipio.
La Mostra d’Arts Tradicionals de Caça también es «un evento muy importante para nosotros, ya que Alaró es un pueblo cazador con mucha tradición». El alcalde subraya además la importancia de los cazadores en la preservación del medio ambiente. Concluye Perelló invitando «a todos los mallorquines a venir a nuestro pueblo a disfrutar de todo lo que tiene para ofrecer». Ambos días habrá diferentes zonas de aparcamiento alrededor del centro que pondrán más fácil aún la visita.