Rafael Nadal volverá a la competición en el Masters 1000 de Montecarlo con la pretensión de sumar su duodécimo éxito en el Principado y asaltar el número dos del mundo que está en manos ahora del ruso Daniil Medvedev.
El tenista mallorquín, ausente de las pistas desde el Abierto de Australia, cuando perdió ante el griego Stefanos Tsitsipas, entrará en acción el miércoles, contra el vencedor del duelo entre el francés Adrian Mannarino y el argentino Federico Delbonis.
En Montecarlo coincidirá con su tío, Toni Nadal, que inicia una nueva aventura profesional con el canadiense Felix Auger Aliassime. «Estoy feliz por Toni y también por tener a alguien tan bueno como Felix en la Academia. Tiene mucha experiencia y le será de gran ayuda. Quiero lo mejor para mi tío, no tiene que preguntarme nada sobre a quién entrena. Le agradezco todo lo que ha hecho por mí y me alegra que esté de vuelta y que podamos compartir tiempo juntos», dijo Nadal en Montecarlo.
El manacorí ha estado casi dos meses sin competir. Las molestias en la espalda le apartaron del circuito. «Estoy bien, entreno bien desde hace semanas, no he tenido problemas. Llego bien preparado», añadió. «El cuerpo responde bien y espero estar sano para tener opciones y competir con normalidad. No estoy acostumbrado a llegar aquí con tan pocos partidos. Es una parte importante de la temporada para mí y creo que he hecho el trabajo adecuado»,
Rafael Nadal, de 34 años, se muestra optimista a pesar del tiempo de inactividad. «En ocasiones he tenido éxito sin jugar mucho. El objetivo es estar listo para el primer partido y ver la situación día a día», indicó el español que reconoce el Masters 1000 de Montecarlo como uno de sus torneos «favoritos».
«Me encanta estar aquí aunque echemos de menos al público», añadió el jugador balear no piensa ahora en Roland Garros que días atrás anunció el retraso de una semana en su comienzo. «Se jugará con normalidad dentro de las posibilidades que haya en Francia. Pero habrá solo dos semanas hasta Wimbledon», advirtió el balear.