El mallorquín Rafael Nadal señaló este miércoles que la decisión de renunciar a disputar el Abierto de Estados Unidos había sido tomada con cautela y debido a la situación sanitaria y a su estado de ánimo y añadió que respeta el trabajo de la ATP y USTA por hacer que el tenis vuelva, y también a los jugadores que decidan acudir a Nueva York porque necesiten el dinero de los premios.
En una videoconferencia con varios medios de comunicación, Nadal señaló también que sentía la cancelación del Mutua Madrid Open, pero entendía que era una decisión «sensata y coherente».
Nadal añadió que no sabe aún si participará en el Masters 1.000 de Roma, aunque lleva entrenándose en tierra desde hace meses, y que espera ahora a ver como evoluciona la situación de la pandemia, y el nuevo calendario tras la cancelación de Madrid, para decidir.
«Como todas las decisiones, al final no se toman a la ligera y hay que consultarlas bien con la gente que tengo al lado y que realmente me importa. Creo que en la situación actual todas las decisiones son válidas. No hay nada que sea seguro o correcto» afirmó sobre Nueva York.
«Pero la situación sanitaria es el primer inconveniente básico a la hora de tomar mi decisión, la situación parece que no está del todo controlada, por lo cual en este caso, consultado con mi equipo decidimos esto», prosiguió Nadal.
«Segundo, el calendario es complicado después de muchos meses sin competir. Pasar de pista dura a tierra, sin apenas tiempo y prepararse se me hace peligroso para mi cuerpo y mi futuro», continuó.
«Luego, un tema de ánimo personal. La situación está como está, y mi ánimo no estaba como para viajar a Nueva York y competir. Si voy a competir es para tener todos los sentidos puestos en la competición y rendir al máximo, y a día de hoy hubiera sido complicado.
«Las circunstancias me han forzado a tomar esta decisión», dijo sobre su renuncia a defender el título en Flushing Meadows. «No quiero hacer viajes largos, aquí en Mallorca está todo bajo control», añadió.
Preguntado sobre si cree que este Grand Slam se disputará finalmente, Nadal dijo: «A día de hoy se va a disputar, parece que sí, pero no puedo decir lo que va a pasar en las próximas semanas. La intención desde luego es que se juegue Cincinnati y Nueva York. La intención de la ATP y la USTA es mantener el torneo».
Nadal no quiso entrar en si es correcto que se dispute este 'grande' debido a la situación que sufre Estados Unidos. «Yo no soy quien para decir si es una decisión acertada o no. Respeto todo el trabajo y la actitud positiva de la ATP y de la USTA por hacer que el tenis vuelva», comentó.
«También respeto a los otros jugadores que decidan ir, porque tengan por ejemplo una situación diferente y quieran ganar un dinero allí que necesitan. Respeto todas las decisiones, pero hoy por hoy es difícil decir si es lo correcto o no», zanjó.
Sobre su futuro, el número dos del mundo dijo que «tras la cancelación del torneo de Madrid», no sabía aún estaba su calendario. «Estoy preparándome para la tierra en Europa. Depende de como esté la situación y si todo está bajo control o no», dijo sobre las próximas citas, que incluirían Roma y Roland Garros.
«Entendí que para mi cuerpo era mucho mejor entrenar en una superficie lenta, menos agresiva para el bienestar general. Aunque eso no me quitaba para haber podido jugar luego en Nueva York», dijo.
«No se si jugaré Roma o no. Espero noticias del nuevo calendario adaptado después de la cancelación de Madrid y a partir de ahí tendré que tomar decisiones.
Nadal aseguró además que si había hecho varios test y que todo estaba correcto. «Sí, me he hecho test varias veces por varias cosas que he tenido que hacer médicas y todo bien, por suerte».
Respecto al torneo de Madrid, Nadal comentó que era «una situación desagradable para la ciudad, y para los organizadores» de los dos eventos previstos este año (Mutua Madrid Open y Finales de la Copa Davis).
«La situación sanitaria dificulta mucho que se puedan hacer eventos de este calibre con jugadores de todas partes del mundo y muchos que hubieran venido desde Nueva York», razonó.
«La situación en los últimos días en España podría estar no del todo controlada y con rebrotes contagios, y por lo tanto hay que tener un poquito de paciencia para ver como van las cosas», dijo.
«Un torneo de este calibre no se organiza de un día para otro. A nivel financiero entiendo que un torneo de estas condiciones, sin público y con todos los protocolos que hay que preparar, hubiera sido un destrozo para los promotores», explicó.
«Las cosas tienen que ir bien para todos, para los jugadores, los promotores y la ciudad. Si hubiera habido contagios habría salido de una manera nada positiva. Para mi ha sido una decisión sensata y coherente», sentenció Nadal.
El zurdo español dijo que nunca «hubiera querido así el 2020». «Ni yo ni nadie. Después, lo que pueda suceder en el 2021 se verá y lo encararé con la máxima ilusión si, es que viene, y con la mayor profesionalidad posible», dijo.
«Me ha pillado (toda esta situación) en una edad avanzada y en un buen momento profesional de mi carrera. Así que, positivo a nivel profesional no ha sido en ningún caso», afirmó Nadal.