Rafa Nadal ya está en casa. El tenista de Manacor ha aterrizado en la tarde de este jueves en Palma para descansar y recuperarse de su lesión sufrida en Australia. A pesar de abandonar el primer Grand Slam es optimista. «Mantengo mi calendario y la intención es estar en Acapulco a finales de febrero».
«Cuando hay más lesiones de la cuenta es porque algo pasa», ha declarado en el aeropuerto de la capital balear, al que llegó acompañado por su equipo encabezado por el extenista Carlos Moyá.
El tenista, no obstante, ha matizado que sus declaraciones sobre ese hecho puntual del aumento de las lesiones entre los tenistas de élite «en ningún caso han sido en beneficio personal».
«Di mi opinión (sobre las bajas por lesión) al comenzar el torneo (de Melbourne), no fue una opinión en caliente. Con 31 años no pido ningún cambio de superficie, calendario ni de bolas, pero si dentro de algunos años existe la posibilidad de realizar algún cambio en beneficio de las futuras generaciones de tenistas y mejorar su calidad de vida sería muy positivo; sobre todo para la salud de los deportistas», ha explicado el jugador número uno del mundo.
Con respecto a que si la lesión que ha sufrido en Australia, unida a otras que han lastrado su carrera, le han hecho pensar en una retirada, Nadal fue contundente.
«No sé hasta cuando voy a jugar, si serán tres, cuatro o cinco años más. Pero cuando llegue ese momento lo sabré y no tendré ningún miedo, pero ahora no me planteo mi retirada. Los tenistas somos súper privilegiados al tener el circuito y las facilidades que tenemos para practicar un deporte que tanta ilusión nos hace desde niños», ha subrayado.
El tenista mallorquín ha insistido que al referirse a la posibilidad de realizar cambios en el tenis para prevenir las lesiones en «ningún caso» lo ha hecho para su beneficio personal.
«Pocos deportes, como el tenis, se desarrollan (básicamente) sobre superficies de cemento, duras, muy agresivas, pero soy un jugador más que expone su opinión», ha precisado Nadal.