El tenista número uno del mundo, Rafael Nadal, dijo que la incorporación del también mallorquín Carlos Moyá a su equipo de entrenadores ha añadido frescura y energía positiva a su rutina de entrenamiento.
Moyá, que también fue número uno del mundo, se unió al equipo del balear en diciembre para trabajar junto a Toni Nadal, ayudando a revitalizar la carrera del tenista de 31 años.
Tras encadenar dos años de lesiones y problemas físicos, Nadal se recuperó en 2017 hasta situarse en el primer puesto del ránking, ganando su décimo Roland Garros y su tercer Abierto de Estados Unidos. Además, el mallorquín llegó a la final del Abierto de Australia, donde perdió ante su eterno rival Roger Federer.
«Carlos ha sido un apoyo muy bueno. Vino con ilusión y con la creencia de que haciendo una serie de cosas mis resultados podían ir a mejor», dijo Nadal en una entrevista con El Español.
«Me ha servido, ha sido una inyección de energía positiva para mí», añadió Nadal. «Hemos cambiado un poco la forma de entrenar. Para Toni también ha sido bueno».
Nadal dijo que cuando se incorporó Moyá, el extenista estudió sus rutinas diarias de entrenamiento antes de ofrecer ideas específicas de cómo mejorar su juego.
«Cuando llega alguien nuevo también es más fácil escuchar porque es algo diferente. Y para Toni, a la hora de hablar conmigo, tener el refuerzo de la idea de Moyá lo ha hecho todo más sencillo», añadió el tenista.
Nadal jugará en Pekín y Shanghái el mes que viene dentro de su planes para intentar terminar el año siendo número uno del mundo y ganando por primera vez el ATP Finals.