El extenista Carlos Moyá está «muy ilusionado» en su nueva etapa dentro del equipo de Rafa Nadal, aunque también afirmó que es algo que nunca pensó que iba a suceder, ya que pensaba que acabaría su carrera con Toni Nadal y su técnico, Francis Roig, y es por ello que espera que el año que viene el balear recupere su «máximo nivel».
«Cuando te llama el equipo de uno de los deportistas más grandes de la historia, y sobre todo por lo que nos une desde hace muchos años, pues obviamente que uno está muy ilusionado y contento. Soy muy optimista de que todo va a ir bien y de que Rafa recuperará su máximo nivel», afirmó en una entrevista en el programa 'El Transistor'.
El exnúmero uno, que a principios de diciembre rompió su relación profesional con el canadiense Milos Raonic, admitió que «nunca» pensó que todo esto iba a suceder. «Pensaba que iba a finalizar su carrera con Toni Nadal y con Francis, porque Rafa es una persona de costumbres y le gusta mantener un equipo fiel. Además, él nunca me insinuó nada», apuntó.
«Me llamó Toni y me dijo desde un principio de unirme al grupo, sin tener que sustituir a nadie. Luego quise hablar con Rafa para saber cual era su idea y qué hambre tiene para volver a ser número uno, y ya después de esta llamada acabo de convencerme de que iba a valer la pena», relató en referencia a como sucedieron los acontecimientos.
Por otro lado, reiteró que Nadal está con muchas ganas, aunque asume ha tenido un 2016 «irregular a consecuencia de las lesiones» y que ahora tiene «un problema de confianza». «No creo que tenga un problema tenístico, ya que a nadie se le olvida jugar al tenis de un día para el otro», puntualizó.
«Además, siempre hay partidos que pueden ser un punto de inflexión cuando ganas, y en este sentido Rafa ha salido perjudicado ya que ha perdido muchos de ellos y no podía recuperar nunca la confianza total», añadió al respecto.
A nivel personal, Moyá destacó que será Nadal «el que decida quién irá a cada sitio». «Tampoco lo tenemos muy definido, por lo que podrán haber cambios. Lo que sí que puedo decir es que ya estamos empezando, y ya he ido a Manacor a verle. Él luego se irá a Abu Dabi, que no iré, y ya sí que les acompañaré a Melbourne para el Open de Australia», afirmó.
«Yo había oído hablar de él, aunque era conocido por ser el sobrino del exfutbolista Miguel Ángel, y pese a que los dos éramos de Mallorca, nunca habíamos coincidido. No fue hasta en un Master de Stuttgart cuando lo conocí, que por aquel entonces Rafa tenia 11 años, y estuve haciendo un peloteo con él. Me sorprendió su timidez, pero si que vi la manera en la que se transformó cuando se puso a jugar conmigo», concluyó.