Al igual que ocurrió en el Santiago Bernabéu, en la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones, Carlo Ancelotti tiene una duda por despejar para la vuelta en el Etihad Stadium. De debatirse entre Aurélien Tchouaméni y Nacho Fernández, eligiendo al francés que no podrá jugar en Mánchester por sanción, pasa a valorar las opciones de Éder Militao, al que probará antes en Mallorca.
Pasará una prueba de fuego el central brasileño el sábado en Son Moix, en la que todo apunta a que será su primera titularidad desde que el 12 de agosto cayó lesionado en el primer partido oficial de la temporada.
En la primera jornada de LaLiga EA Sports, Militao sufrió la desgracia de fracturarse el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, que le ha mantenido durante siete meses y medio de baja. Ocho meses y un día después puede disfrutar de su primera titularidad. «Militao físicamente está muy bien, ha trabajado mucho», resaltó Carlo Ancelotti reforzando las opciones.
El central brasileño reapareció, disputando los últimos compases de un partido sentenciado en el Bernabéu, el pasado 31 de marzo ante el Athletic Club que tenía la mente en la final de la Copa del Rey. Desde entonces Militao ha aprovechado cada entrenamiento y un trabajo de fortalecimiento extra por la tarde en sesiones individualizadas, para mejorar su físico.
Ancelotti quiere ver en acción en un duelo de LaLiga a Militao para sacar conclusiones sobre su estado y el nivel competitivo. En función de las sensaciones del jugador tendrá más o menos opciones de cubrir la baja de Tchouaméni en el Etihad, donde Nacho Fernández es la alternativa como pareja de Antonio Rüdiger, el único indiscutible tras un nuevo marcaje repleto de firmeza a Erling Haaland.
El técnico italiano alimentó la opción de alinear a Militao ante el Manchester City recordando una situación con el alemán Sami Khedira en una final de la Liga de Campeones. Le dio la titularidad ante el Atlético de Madrid en Lisboa, el día de la conquista de la décima, después de haber sufrido una rotura del ligamento colateral medial y del ligamento cruzado anterior que le tuvo seis meses de baja. Antes de la gran cita reapareció disputando 55 minutos ante el Celta en Balaídos y 62 contra el Espanyol en el Bernabéu.