No hay palabras. La muerte de Bartolomé Beltrán ha causado una profunda conmoción en el mallorquinismo y entre los colaboradores y profesionales del club en la etapa en la que el médico y comunicador fue presidente del Real Mallorca. Son muchas las definiciones de quienes compartieron tantas horas con él y dos destacan por encima de todas: su condición de hombre dinamizador y la capacidad que tuvo para revertir la historia de club.
Toni Tugores, delegado de campo y persona que trató muy directamente con Beltrán, destaca el cambio que supuso para el Mallorca su presencia en el club. «Junto a Mateo Alemany y a toda la gente que estuvo en el consejo esos años, él transmitía ilusión y una ambición desbordante. Fue una persona muy importante en el cambio tanto estructural del Mallorca a nivel deportivo y como sociedad. Convocó al mallorquinismo, lo hizo resurgir. A partir de ahí todo cambió. Su llegada fue importante, ese grupo donde estaba Asensio, Beltrán, Alemany dio como resultado 16 años consecutivos en Primera.. Fue un predicador, con sus apóstoles. Puso en primera línea al Mallorca y tuvo ideas revolucionarias. Recuerdo ahora esa de llevar a la afición con portaviones a Valencia. Fue un hombre con un entusiasmo desbordante», dijo Tugores.
Ramon Servalls llegó al Mallorca de la mano de Beltrán y ocupó el cargo de director de relaciones externas e institucionales viviendo en primera persona el cambio que llevó a cabo el club. «Ha sido un fuerte impacto. Recuerdo esa energía esas ganas que transmitía, de ir a ver gente, de hacer cosas y llevara a cabo acciones en barriadas de Palma, en cualquier pueblo, esa energía que tenía, esa vitalidad, esa bomba de mallorquinismo que era se ha apagado de golpe, me ha impacto mucho su muerte. Era un hombre único. Nos ha dejado un gran mallorquinista», indicó Servalls, que recuerda cómo le convenció para que ‘ichara' por el club. «Me convenció su carisma, su propuesta, estábamos en Segunda y tenía clarísimo que subiríamos a Primera, lo veía tan convencido, ese carisma, esas ganas, todos teníamos ese convencimiento de que las cosas irían bien y de que queríamos trabjar con él», manifestó Servalls.
Pepe Bonet ha sido el mejor director deportivo en la historia del club y también trabajó codo con codo con Beltrán, además de ser el entrenador junto a Tomeu Llompart que ascendió al Mallorca a Primera División en la época del doctor en el club. Asegura que fue un «revulsivo» a todos los niveles. «Fue un revulsivo, movilizó a todos y el Mallorca cambió. El Mallorca era un club que en ese momento estaba en esa zona donde no iba ni hacia adelante ni hacia atrás y su forma de trabajar y los apoyos externos que tenía fueron determinantes. Llegó en un momento donde las plataformas televisivas entraron a cambiarlo todo, era un momento muy crucial y muy trascendente en la historia del Mallorca y él fue determinante en ese cambio», declaró.
Joan Frontera, que en la época de Beltrán fue el responsable de comunicación del club, exhibió también su enorme tristeza al conocer la noticia. «Ha sido una gran sorpresa. Fue una persona vital, muy imaginativa, detallista con todo el mundo un trabajador incansable. Con la ayuda de Antonio Asensio abrió camino, lo profesionalizó, capitalizó el Mallorca hacia una nueva era e hizo que pasara del sufrimiento al divertimento. Abrió mucho camino», relataba el periodista.
«Él profesionalizó el Mallorca, hasta que él llegó había muchos voluntarios que ayudaban al máximo como era lógico en el Mallorca y en muchos clubes como el Mallorca y él cambió esa idea y lo profesionalizó. Recuerdo que me llamó, nos entrevistamos y me mostró el proyecto y me lo explicó y estaba bastante convencido de todo. Después me entrevisté con Mateu Alemany y me decidí. A Beltrán siempre le agradecí la confianza que puso en nosotros, aportaba muchas ideas y dejaba además que todos los que estábamos ahí aportáramos las nuestras. Antes se jugaba por no bajar y puso las bases para ir hacia Europa. El segundo año fue de mucha presión y luego todo explosionó en Vallecas y luego estuvo la llegada de Cúper. Puso la base para ir a Europa». «Ea un hombre de trabajar 24 horas, 7 días a la semana. Siempre tenía ideas y podía llamar a cualquier hora. Recuerdo que tras perder en Valencia la final, al día siguiente vino para dar la mano uno a uno a los mallorquinistas que llegaron en barco y volvemos a coger el avión para regresar después con el equipo. Era muy detallista iba más allá de lo que imaginable. Tenía una idea cada dos minutos y la mayoría tenían que ir adelante», recordaba Frontera.
Joan Buades, que fue responsable de los servicios jurídicos del Mallorca, lamentó profundamente el desenlace y destacó el papel que tuvo el médico y comunicador en la vida del club. «Fue una persona muy relevante. El mallorquinismo actual nace con Tomeu Beltrán. Pasó una época complicada y es una gran pérdida. Espero que la entidad esté a la altura del personaje. Se ha valorar que fue un hombre fundamental para la entidad. El Mallorca le debe mucho lo que es a día de hoy y para llegar donde llegó. Movilizó a la sociedad en favor del club. El Mallorca ahora es muy importante, está claro, pero su día, esos años, era parte de la vía diaria de Mallorca. Transmitió esas ganas de ser importantes y supo gestionar mejor que nadie ese entusiasmo a todo. En el ámbito emocional no lo superó nadie. Cambió la dinámica del club», asegura Joan Buades.
Por su parte Chichi Soler, capitán del Real Mallorca durante muchas temporadas, también en la época de Beltrán, manifestó su pesar al conocer la noticia. «Estoy muy sorprendio por esta trágica pérdida. Para toda la ciudad, para el Mallorca y para el mallorquinismo fue una persona muy importante, una persona que revolucionó el sentimiento mallorquinista, creó muchas peñas, un dirigente muy cercano con la afición y los jugadores y en esos momentos apostó muy fuerte para que el equipo regresara a Primera División. Lo conseguimos entre todos y creo que a nivel sentimental dejó una impresión muy fuerte a todos los que le conocimos», manifestó Soler.