Pocos estrenos estos últimos años han estado precedidos de una expectación como la que despierta hoy el primer partido del Mallorca en Son Moix correspondiente a este curso 2023/2024. El equipo de Javier Aguirre se mide al Villarreal (19:30 horas, LaLiga Movistar TV) en una tarde de estrenos y emociones. El buen sabor de boca que dejó el encuentro de la primera jornada ante Las Palmas sirve de aliciente, pero lo es mucho más el poder ver sobre el césped de estadi de Camí dels Reis a Sergi Darder, el fichaje más esperado de los últimos años y que por fin después de una interminable negociación se ha hecho realidad.
El suyo fue un caso inédito. Jugó antes de entrenar y fue el mejor. Agitó el partido, movió al equipo y exhibió la magia que lleva en sus botas. Ahora, por fin, la afición le verá vestido de rojo en su mejor momento. La motivación de Darder es de diez y con él en el once, más allá del sistema, siempre pueden sucede cosas. Todos los jugadores están disponibles y la enfermería está vacía. Otra buena noticia.
La afición ha conectado más que nunca con el equipo y bordea los veinte mil socios. Hoy se espera una entrada que roce el lleno. La permanencia en Primera y los fichajes que ha ido concretando el club han sido el aliciente definitivo para vaticinar un gran año. A todo esto, las obras del estadio de Son Moix siguen avanzando y hoy se estrenará la nueva tribuna cubierta. Más argumentos, imposible.
Futbolísticamente el Mallorca llega tras el empate en Las Palmas y con la vista puesta en cómo puede hacer daño a un Villarreal siempre potente y temible y que ya ha mordido el polvo en sus últimas visitas al campo bermellón. Perdió la pasada temporada y solo pudo empatar la anterior. Pero es un león herido y eso siempre suele causar problemas.
Sin embargo, el Mallorca tiene argumentos de peso para hacerle frente al rival de esta tarde. Futbolísticamente el plan ya lo desveló Aguirre en la rueda de prensa de ayer. Ellos tienen un equipo para tener el balón y el Mallorca se lo dará sin problemas. Le dará el balón y también el juego. Puede salir bien o puede salir mal. En Las Palmas se avanzó el equipo local y el Mallorca tuvo que hacer el sobreesfuerzo posterior para empatar.
La espera del once rojillo es arma de doble filo porque si roba y se adelanta en el marcador es muy difícil que pierda, pero si el rival es quien inclina el campo a su favor, entonces la cosa se complica. No obstante, el gran trabajo de Aguirre y de Toni Amor ha sido la construcción de un Mallorca por encima de todo fiable, con capacidad de respuesta ante la adversidad y valiente.
El equipo, más allá del sistema y de la adaptación de los nuevos fichajes, ha creido en el plan del entrenador y esto le ha llevado a ganar muchos partidos. Hoy de inicio, además de Darder, también estará previsiblemente Raíllo, por lo que la línea defensiva podrá rearmarse y naturalizarse con la presencia del capitán cordobés, cuya aportación es innegable. Con él en el equipo la defensa tienen un referente claro y es a partir de él desde donde el Mallorca empieza a crecer.
A partir de ahí no hay que engañarse, la historia es más o menos clara: balones a Muriqi. Da un poco igual de donde procedan si de un costado u otro porque el Kosovar lo suele rematar casi todo. Esta temporada la presencia de Sergi hace pensar que gracias a su visión de juego y capacidad de ver antes el fútbol que sus rivales, le permitirán poner más de un balón de gol al delantero de referencia.
El papel está casi todo agotado, y es que no faltan alicientes de cara a este partido, pero sobre todo está la ilusión general de un proyecto que sigue creciendo y que da pasos hacia un futuro que promete mucho. Pero todo pasa por ganar partidos y sumar de tres en tres. Hoy es el primer test y no será fácil. Nada fácil.