El Real Mallorca salva un punto de oro en Zorrilla en un encuentro que acabó con empate a tres. Ocurrió casi todo en un segundo tiempo histérico de idas y venidas constantes donde se enfrentaban dos equipos con necesidades de puntuar para tomar oxígeno. El once balear salvó la igualada en el descuento con un penalti materializado por Muriqi. Los rojillos suman 34 puntos y dan un paso más hacia la salvación.
En la primera parte el Mallorca se plantó en Zorrilla con las ideas aparentemente claras, practicando una presión muy alta cuando el rival quería jugar desde atrás y replegando con sentido cuando tocaba dar un paso hacia el área de Rajkovic. Más o menos como siempre. Lucas Rosa a los siete minutos avisó con un tiro cruzado que salió fuera mostrando las primeras vías de agua en la zaga rojilla.
Sin embargo, el equipo de Aguirre era más o menos eficaz en el robo de balón y en la salida a campo rival. Lo probó Jaume Costa a los veinte minutos en un centro a Amath. El atacante le pegó mal y la pelota salió fuera. Fue una de las tres opciones que tuvo el senegalés, aunque la primera fue la menos clara. Las siguientes en condiciones normales debieron haber terminado en gol, pero no fue así. Ahí estuvo la clave del partido.
A los 23 minutos de nuevo Amath hizo soñar al mallorquinismo. Con esa punta de velocidad innata en él ganó metros por nada derecha y se metió en el área. Masip empezó a ver la portería muy grande, pero el atacante la vio pequeña. Le pegó con intención, pero el guardameta tocó lo justo para enviar a corner. Mala suerte. Acto seguido pudo redimirse todavía en una acción más clara. Galarreta metió entre líneas y Amath encontró espacio entre centrales para ganar metros en el área, pero una vez más se le llenó el horizonte de Masip. No había manera.
Y en el fútbol cuando perdonas sueles pagarlo y el Mallorca lo pagó. Y de qué manera. A la media hora el Valladolid roba un balón en la sala de máquinas y monta una jugada rápida con la que obliga a recular a la defensa rojilla y la va desarbolando poco a poco. El esférico lo mete Fresneda a Kike Pérez, que libre de marca se posiciona para mandar el balón lejos del alcance de Rajkovic. A partir de ahí nada más. El Valladolid llegó prácticamente una vez y conseguía avanzarse en el marcador.
En la segunda parte el tobogán de sensaciones no se dejó esperar. Por regla general pasan muchas cosas tras el descanso y ayer no fue una excepción. Rajkovic a los 49 minutos protagonizó una acción clave al detener a bocajarro un disparo de Oscar Plano. Una intervención salvadora y decisiva para lo que vendría después.
Esa acción espoleó a los rojillos que tres minutos después empataba el partido. Kang In Lee vio la carrera de Maffeo por banda derecha y este mete milimétricamente un balón al segundo palo para que salte el pirata Muriqi y en el segundo palo anote de cabeza el uno a uno. Partido nuevo.
El Valladolid encajó mal el tanto mientras que el equipo de Aguirre dio por fin un paso adelante inclinando el campo a su favor. A los 56 minutos el Mallorca forzó una falta al borde del área y Kang In afiló su bota para golpear con intención. El balón lo rechazó la barrera y la pelota llegó a Morlanes situado en esa peligrosa segunda línea de remate, ahí mismo, cerca de la frontal del área. Sin pensárselo dos veces lanzó un zapatazo directo a gol. Lo imposible se había vuelto real.
El Mallorca había remontado un marcador adverso fuera de casa. Ahora tocaba conservarlo o incluso aumentar la renta. Casi lo hizo de nuevo Amath que por tercera vez se quedó en franca posición de anotar, pero estrelló la pelota en un defensor. Definitivamente el equipo rojillo estaba desatado, aunque no duró mucho la alegría. El Valladolid no renunciaba a nada y en otra jugada donde la defensa exhibió contundencia en sacar la pelota, Amallah, que entró a los 65 minutos, anotó dos después el empate. Todo igualado y de nuevo partido nuevo. Faltaban veinte minutos más el descuento. Un falta del Valladolid de nuevo mal defendida por el Mallorca la remata Larín de cabeza completamente libre de marca. La pelota se va fuera por muy poco. El encuentro requería de nuevo de dar un paso más por parte del equipo balear, pero quien lo dio fue el Valladolid. Tras varios avisos de nuevo marcó gracias a una acción de Monchu, que remató libre de marca un balón centrado al segundo palo. Un jarro de agua fría tremendo, pero todavía falta un giro más de guion al partido.
En la última acción del partido el Mallorca mete un balón al interior del área y Larin intercepta el balón con la mano tras el pase de la muerte de Muriqi. No había dudas y por fin el VAR jugó a favor. Penalti que se encarga de convertir el delantero kosovar. Al final empate a tres en un partido histérico. El Mallorca salva un punto de oro en la carrera por la salvación.
- Ficha técnica:
3 - Real Valladolid: Masip; Fresneda, Joaquín, Javi Sánchez, Lucas Rosa (Escudero, m.66); Kike Pérez (Monchu, m.80), Hongla, Roque Mesa (Iván Sánchez, m.66); Plata (Kenedy, m.80), Larin, Plano (Amallah, m.66).
3 - RCD Mallorca: Rajkovic; Hadzikadunic, Valjent, Raíllo, Costa; Maffeo, De Galarreta, Morlanes (Grenier, m.74), Lee Kang In (Ángel, m.85); Amath (Sánchez, m.74), Muniqi (Abdón, m.90+).
Goles: 1-0, m.33: Kike Pérez. 1-1, m.53: Muriqi. 1-2, m.58: Morlanes. 2-2, m.68: Amallah. 3-2, m.86: Monchu. 3-3, m.94: Muriqi, de penalti.
Árbitro: Alejandro Muñiz Ruiz (Comité gallego). Mostró cartulina amarilla a Roque Mesa (m.10), Lucas Rosa (m.55) y Cyle Larin (m.93), del Valladolid; y a Ruiz de Galarreta (m.38), Valjent (m.44), Jaume Costa (m.64), Morlanes (m.74) y Abdón Prats (m.90+), del Mallorca.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la vigésima octava jornada de LaLiga Santander disputado en el estadio José Zorrilla ante 18.010 espectadores