El mercado de invierno apenas está registrando movimientos cuando se cumplen casi dos semanas desde que se levantara la persiana el pasado 1 de enero. Tras confirmarse la salida de Lago Junior al Málaga, el Real Mallorca intensifica sus operaciones y lo hace sobre todo centrándose en el capítulo de bajas. El canterano Javi Llabrés y el central argentino Franco Russo se encuentran en la rampa de salida y su marcha se presume inminente.
El propio entrenador del Real Mallorca, Javier Aguirre, ha abierto la puerta de salida a Javi Llabrés para que acumule minutos. «Javi tiene que salir y le dije que necesita jugar, me da igual en el Mallorca B (que no puede por motivos de contrato) o en un Segunda o un Primera. No sé dónde irá. No me estorba, entrena muy bien y hay que ver qué solución le damos. Es futuro del Mallorca y el canterano con mayor proyección que tenemos», manifestó Aguirre.
La salida de Franco Russo también se presume rápida una vez que no ha entrado en la convocatoria para los partidos que el Mallorca disputará ante Osasuna en El Sadar y frente a la Real Sociedad en Anoeta en los octavos de final de la Copa del Rey. El argentino, que apenas ha disfrutado de minutos en lo que llevamos de curso y cuyo contrato en la Isla expiraba el 30 de junio de 2024, está a punto de concretar su marcha a una liga extranjera. El Ludogorets búlgaro se ha convertido en el mejor colocado para hacerse con sus servicios.
Russo llegó a la disciplina del Real Mallorca en la temporada 2018-19 celebrando el ascenso a Primera División. La siguiente campaña se marchó cedido a la Ponferradina de Segunda División y se forjó para convertirse en un jugador con más peso en los esquemas de Luis García Plaza. Volvió a disfrutar de un ascenso como mallorquinista, pero en Primera su protagonismo fue recayendo de forma progresiva. Esta temporada ha participado en cinco encuentros, tres de liga y dos de Copa, y buscará mayor participación en un nuevo destino.