Con el cartel de la Copa del Rey de fondo, en un campo abarrotado y con un rival de Preferente delante, el Mallorca cerró con el mejor candado posible al primer gran bloque del calendario. Se va de parón el equipo de Javier Aguirre con todo aprobado y sin apenas deberes en la mochila. Después del primer trimestre, poco se le puede reprochar al conjunto balear, que abre el paréntesis desde una de las zonas más cálidas de la Liga y con el billete para la segunda ronda del torneo del KO bien guardado en la cartera.
El Mallorca no especuló en Calahorra, la localidad riojana en la que se le reclamaba para su primera evaluación paralela. No se trataba de una prueba de máxima dificultad —el Club Deportivo Autol, su oponente, vive cinco categorías por debajo—, pero tampoco dejó una sola grieta para la sorpresa, aplicándose con mano de hierro desde el principio. En quince minutos había encaminado la eliminatoria y en media hora ya la había resuelto. Aguirre apenas tuvo que recurrir a la primera unidad del vestuario y pudo aprovechar la segunda parte, entre otras cosas, para darle minutos a Tino Kadewere, la única de sus incorporaciones que todavía no se había calzado las botas. Sin sustos, ni en el marcador ni en la enfermería, echó el freno de mano hasta su próximo partido oficial, que ya será después del Mundial de Qatar. De hecho, solo lo quedan dos encuentros para liquidar el año 2022: la segunda ronda de la Copa —el 21 de diciembre— y la decimoquinta jornada de Liga contra el Getafe, una cita programada en principio para el 31 de diciembre.
Como la mayoría de clubes de Primera, el Mallorca invertirá el parón del Mundial en aparcar la presión de las últimas semanas y en llenar el depósito para lo que viene. Según explicó Aguirre en su última comparecencia, el equipo descansará entre diez y doce días tras disputar contra el Poblense el Trofeu Agricultura del miércoles y cuando vuelva jugará otros dos o tres amistosos —uno de ellos contra el Constància— para ir recuperando la tensión en las piernas.
Se larga el Mallorca con unos números muy equilibrados en la tarjeta. Entre las dos competiciones acumula seis victorias, cuatro empates y cinco derrotas y un balance de goles igualado que el sábado se inclinó claramente a su favor con la abultada victoria sobre el Autol. En esa dirección, lo más importante es la brecha que ha abierto con respecto a las posiciones de descenso. Le separan ocho puntos del barranco y hay otros seis equipos de por medio.
Aguirre, que cuando se reanude la competición tendrá otra ventana del mercado a la vuelta de la esquina, ha utilizado a 25 futbolistas durante el primer trimestre. Los últimos en ponerse a la fila son el portero Leo Román, que solo tuvo que intervenir una vez en Calahorra y lo aprovechó para lucirse, y el propio Tino Kadewere, que también incluyó su nombre en el listado de goleadores. Solo faltan por debutar otro guardameta, el eslovaco Dominik Greif, y los canteranos Javi Llabrés y Josep Gayà.
El miércoles, nuevo sorteo de Copa
El Mallorca conocerá esta semana a su adversario en la segunda ronda la Copa del Rey, una fase en la que entran los 55 ganadores de las eliminatorias disputadas durante el fin de semana y el Racing de Santander, que había quedado exento de las confrontaciones iniciales del torneo como campeón de la Primera RFEF la temporada pasada. Los que todavía no entrarán en el bombo son los participantes de la próxima edición de la Supercopa de España: Real Madrid, Barcelona, Real Betis y Valencia. El sorteo de las 28 eliminatorias siguientes se llevará a cabo el miércoles a las 17.00 horas en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas y se jugarán a partido único el 21 de diciembre, solo tres días después de la final de Qatar.