Dominik Greif sale de la sombra que le mantuvo apartado de la luz futbolística el pasado curso. Lastrado por una lesión de espalda que le apartó de la lucha por la titularidad en el arco del Mallorca, este año el guardameta eslovaco aparece con renovadas ilusiones y con la firme seguridad de luchar por consolidarse en la portería del Real Mallorca. Por el momento las cosas van bien. Ya arrancó días atrás a nivel personal el trabajo individual en su país y ahora en Son Bibiloni, las sensaciones son muy buenas y todo indica que el jugador ha olvidado la lesión que le impidió demostrar sus cualidades.
Tras la marcha de Manolo Reina y de Sergio Rico, en estos momentos el arco del Mallorca lo defiende el esloveno, Leo Román y el joven Pere Joan. Resta por conoce si el club balear acudirá al mercado a por otro portero de forma más o menos inmediata o esperará a comprobar qué puede ofrecer Domink durante la pretemporada. Sin embargo, resta por comprobar si el equipo se enfrentará ante rivales de mayor peso que los previstos hasta el momento y que realmente puedan ser una verdadera piedra de toque tanto para el guardameta como para el resto del equipo.
Por ahora los tres rivales en Austria son casi más para ir rodando que otra cosa. El Sporting jugará en Palma, pero por el momento no se conoce si existirá o no la opción de medirse a un equipo más de primer nivel de la Liga española o de Europa. En cualquier caso, por el momento Greiff es quien va a salir con todos los números para poder ser titular. Javie Aguirre no lo ha visto en acción y está muy pendiente de él durante los entrenamientos consciente de lo importante que es desde el minuto uno tener a un guardameta fijo y que dé confianza a la defensa. El curso pasado la incertidumbre causada en el arco y las dudas de Luis García jugaron en contra del rendimiento del equipo y de los propios guardametas. De Reina a Greiff, de ahí a Leo Román pasando por Sergio Rico para terminar jugándose de nuevo la salvación con el guardameta malagueño. Un desconcierto absoluto que este año tiene que evitarse a toda costa más allá de la rotaciones lógicas que se puedan dar en la Copa del Rey.
Es una buena noticia que Greif esté recuperado y pueda ofrecer el rendimiento que sí exhibió en el Bratislava y que le catapultaron a ser uno de los porteros con proyección del panorama internacional. El Mallorca pujó fuerte por él y le firmó un contrato largo que expira en junio de 2026. Lo visto el pasado año en Liga y en Copa es un espejismo de lo que realmente debe ofrecer un guardameta de sus prestaciones, calidad y también de su coste. Sin embargo, si bien Greif está saliendo de nuevo a flote, la sombra de Reina seguramente a ser todavía muy alargada y costará olvidar las actuaciones clave que protagonizó el de Villanueva del Trabuco durante los años que defendió el arco balear. Pero Manolo ya es pasado el futuro a partir de ahora se escribe con Greif, Leo Román y Pere Joan.