Hace poco más de un mes, tras lograr una victoria épica en el Wanda Metropolitano y empatar en casa ante el Celta, el Real Mallorca alcanza la cota 20 y disfrutaba plácidamente de una cómoda posición en la tabla y de una sólida ventaja (7 puntos) en relación al Cádiz, que marcaba la línea roja. De repente, todo cambió. Dobló la rodilla con estrépito en Los Carmenes, perdió en casa ante un Barça menor y resucitó a un Levante moribundo para rubricar su peor mes del curso (un punto de los doce últimos) y acercarse al acantilado de la categoría. El colchón se ha visto reducido de aquellos siete puntos a los tres actuales, después del inesperado triunfo del Elche en el feudo del Espanyol el lunes pasado.
Caída libre
Luis García Plaza vive sus peores horas como entrenador bermellón. No encuentra una explicación a la alarmante caída que ha sufrido el equipo en las últimas semanas y que le han convertido en el peor de toda la categoría en este mes de competición. De hecho, desde aquel empate ante el Celta que le dejaba en una posición estable, ha visto cómo le adelantaban por la derecha equipos como Granada o del propio equipo vigués, que entonces se encontraban por debajo. Ahora, andaluces y gallegos aventajan al Mallorca en cuatro y tres puntos respectivamente tras haber sumado 8 y 7 puntos en este último mes de curso.
Por lo que respecta a los equipos que actualmente ocupan el furgón de cola de la tabla, el colista Levante se mantiene alejado de la salvación aunque la victoria ante el Mallorca le ha inyectado una dosis extra de moral para intentar obrar el milagro de la salvación. El Cádiz, que hizo oficial ayer la destitución de Álvaro Cervera y presentará hoy a Sergio González, ha sumado dos puntos, los mismos que el Deportivo Alavés, mientras que el Elche de Francisco ha sumado tres más que los mallorquinistas gracias a la victoria de Cornellà. En el ático de esta clasificación parcial aparecen Villarreal y Sevilla (10 puntos) seguidos de Granada y Barcelona (8).
Con el objetivo de recuperar el pulso y reactivar el ánimo, el grupo de Luis García Plaza prepara desde este martes el encuentro de octavos de final de la Copa del Rey que le enfrentará el próximo sábado, a las 20.00 horas, al Espanyol de Vicente Moreno en Son Moix. Como ha sido norma habitual en el torneo del KO, el preparador madrileño utilizará el duelo para alinear a los futbolistas menos habituales en el torneo doméstico como sucedió en las rondas anteriores. Ni siquiera la ronda (a un paso de los cuartos de final) ni la rivalidad con los de Moreno alterará los planes de un entrenador que, lógicamente, prioriza el devenir en la máxima categoría.