El reportaje publicado por la ESPN contra Robert Sarver, al que acusan de misógino y racista, ha recorrido Estados Unidos de costa a costa. Desde Los Ángeles hasta Nueva York, pasando por Chicago o Phoenix, los principales diarios del país publican en sus ediciones digitales las graves acusaciones contra el dueño de los Phoenix Suns y el Real Mallorca y la investigación abierta por la NBA para tratar de esclarecer los hechos.
El periodista Kent Somers, de Arizona Republic, se muestra partidario de que Sarver se aparte de la franquicia hasta que se aclaren los hechos. «La NBA debe investigar qué ha sucedido y Sarver, alejarse hasta que concluya la investigación. Llámalo suspensión. Licencia pagada. Un año sabático. Lo que sea. No debería ser visto en su asiento habitual junto a la cancha o en las oficinas del equipo. No debería tener nada que ver con la franquicia hasta que se complete la investigación. Y solo entonces si el informe lo exonera», apunta el periodista en su análisis.
La opinión generalizada en la ciudad de Phoenix es que estos hechos están provocando un daño de imagen terrible para el equipo y la ciudad. «La NBA debe ordenar a Sarver que se mantenga alejado. Si incluso el 5 por ciento de lo que se alega en la historia de ESPN es cierto, la NBA debe obligarle a vender la franquicia, que adquirió por unos 400 millones de dólares en 2004. Los 1.000 millones de ganancia supondría un beneficio enorme para Sarver. Y al menos el el próximo propietario podría ser un verdadero administrador de un fideicomiso público y no un tirano con un asiento en la corte».
Varios analistas de la NBA también ponen sobre la mesa cuanto tiempo seguirá Sarver como dueño de los Phoenix. Veremos qué sucede, pero la noticia está en todos los rincones de Estados Unidos.