Después de la pretemporada más atípica de nuestras vidas, de un cierre de mercado que se ha prolongado hasta otoño, la Liga bajará esta medianoche la persiana. Será el punto y final a varios meses de rumores, negociaciones y contactos bajo mano que han provocado un revuelo considerable en el vestuario del Real Mallorca con Ante Budimir como el caso más representativo. Pero no es el único. Futbolistas como Juan Diego Molina Stoichkov y Aleksander Trajkovski tampoco tienen asegurada su continuidad. Será un día largo en las oficinas de Son Moix.
FIN AL CULEBRÓN
¿Qué pasará con Budimir?
A finales del pasado mes de agosto, mientras el Real Mallorca se encontraba inmerso en la concentración de pretemporada en el Pinatar Arena, el Real Valladolid presentó una oferta formal por Ante Budimir: 4,5 millones de euros. El club balear rechazó la propuesta y se remitió a la cláusula de rescisión (15 millones) del delantero croata para zanjar el asunto. Pero Budi se cerró en banda. No participó en ninguno de los partidos de pretemporada y se declaró en rebeldía.
De cara al estreno liguero, Luis García Plaza pudo contar con él, aunque no en las mejores condiciones anímicas, y disputó algunos minutos en el frustrado debut frente al Rayo Vallecano en casa. Sin embargo, a medida que pasaban los días, el caso se complicaba por momentos. En las vísperas de visitar al Espanyol de Vicente Moreno, el técnico madrileño desvelaba que el propio delantero -máximo goleador del equipo el curso pasado en Primera con 13 goles- le había pedido no ser convocado porque «no quiere estar aquí», según las palabras de LGP.
Ante Budimir se enrocó en los días posteriores y ni siquiera se ha entrenado con el resto de sus compañeros. Los propios inquilinos del vestuario, sobre todo los pesos pesados, le han recriminado su falta de profesionalidad. «Budimir no está actuando bien y él lo sabe. Espero que todo esto se solucione lo antes posible porque los únicos perjudicados somos nosotros», volvió a incidir Luis García antes del siguiente encuentro.
El Valladolid, mientras tanto, no ha vuelto a abrir la boca desde aquel 28 de agosto. Ni siquiera ha presentado otra contraoferta y el caso llega a su último capítulo sin un desenlace claro. En el club balear están muy molestos por la actitud de Budimir y también el mallorquinismo se siente herido por la falta de respeto del futbolista, que ha pasado de héroe a villano. A día de hoy, todo hace pensar que el delantero (concentrado con su selección) se quedará en el Mallorca, salvo que depositen su cláusula de rescisión -algo poco probable- o llegue una oferta que sea aceptada por Sarver.
SU CLÁUSULA ES DE 3 MILLONES
Stoichkov quiere salir
Otro caso que preocupa en el seno de la entidad balear es el de Juan Diego Molina Stoichkov. El futbolista gaditano no se encuentra a gusto con su situación y en reiteradas ocasiones ha expresado su deseo de marcharse. Sobre la mesa apareció el interés de Granada, Espanyol o el propio Betis, aunque poco a poco estas opciones se han ido diluyendo y su futuro apunta ahora al fútbol inglés. El Watford es el que más fuerte ha sonado en las últimas horas, aunque el Mallorca, como en el caso de Budimir, no negocia y se remite a su cláusula de rescisión, que es de 3 millones de euros.
En este sentido, Luis García Plaza fue tajante el sábado al término del encuentro ante el Tenerife al afirmar que le «extrañaría» que alguien pagara 3 millones de euros por el futbolista. Cabe recordar que la Balompédica Linense cobraría el 35% de esa cantidad.
DE LOS MEJOR PAGADOS
Trajkovski sigue sin decidirse
El macedonio es otro ejemplo de contratos mal gestionados. El jugador, que es uno de los futbolistas mejor pagados de la plantilla, no quiere perdonar ni un euro y para irse quiere que el club balear le abone la parte del contrato. A pesar de que es un futbolista que gusta a Luis García, es poco probable su continuidad precisamente por su elevada nómina, aunque si finalmente no encuentra destino...
POR ALGÚN PESO PESADO
Temor a una oferta irrechazable
En el Mallorca existe cierta preocupación y observan el último día de mecado con cierto recelo. En el club balear temen algún ‘clausulazo' o alguna oferta que sea irrechazable por alguno de los pesos pesados del vestuario, caso de Iddrisu Baba o del central Martin Valjent, piezas fundamentales en el esquema del técnico y que son cotizados en el mercado de la Primera División. En el caso del internacional ghanés, la situación alcanzaría tintes casi dramáticos porque no tiene un sustituto natural ni específico en esa demarcación.
EN FUNCIÓN DEL CASO BUDIMIR
Luis García quiere un ‘9'
Luis García Plaza lo tiene claro: quiere un 9... y en función de lo que suceda con Ante Budimir, hasta dos. El entrenador madrileño ha dejado claro en sus últiimas comparecencias que al menos un jugador podría venir porque hay fichas para una incorporación sin necesidad de dar ninguna baja. En los últimos días han sonado con fuerza los nombres de los mallorquines Ángel Rodado o Adrià Dalmau para reforzar el ataque. Con Budimir desconectado, LGP solo cuenta con Abdón Prats y Álex Alegría para la posición de delantero centro.