El Cádiz puede echarle una mano al Mallorca. El conjunto andaluz, recién ascendido a Primera División, quiere ceder a su centrocampista Yann Bodiguer y Son Moix o Cornellà podrían ser sus próximos destinos.
Pese a que el centrocampista fue titular la pasada jornada ante Osasuna, lo cierto es que la dirección deportiva cadista le busca acomodo bien en un equipo de Segunda A o en el extranjero. Inicialmente el futbolista vendría para aumentar el potencial en el medio centro y aliviar una posición en la que están Salva Sevilla y Baba y en muchos partidos pueden ser ambos de la partida en el once titular, de ahí que se precise de un nuevo elemento.
El futbolista ahora en el Cádiz, llegó al Carranza tras un breve paso por Córdoba. Casi toda su carrera deportiva la ha llevado a cabo en el Toulose.
El Mallorca podrá ir reforzando su plantilla en la medida en que vayan saliendo jugadores, rebaje el límite salarial y deje fichas libres para poder contratar futbolistas que tengan especial calidad y talento para la Segunda y que a su vez también sean del interés de Luis García Plaza. La pésima imagen ofrecida en el debut esta temporada ante el Rayo ha cofirmado la necesidad de dotar al equipo de futbolitas que tengan una mayor influencia en el juego tanto si son de la partida en el once titular como si tienen que tratar de variar cosas desde el banquillo.
Morrison Palma
Otro de los nombres que también se ha vinculado con el Real Mallorca en estas últimas horas ha sido el del jugador del Club America, Morrison Palma, un joven valor de la cantera mexicana que también juega en el centro del campo. Tanto el caso de Bodiguer como de Morrison son dos futbolistas que en caso de llegar lo harían en calidad de préstamo por lo tanto sería posible rebajar el precio de las operaciones.
El club balear además del centro del campo está trabajando de forma especial en la contratación de hombres de banda que puedan complementar el trabajo de Lago Junior. De momento LGP solo tiene a este futbolista específico y especialista en esta zona y a partir de ahí se ve en la necesidad de ir improvisando como sucedió el pasado partido situando a Dani Rodríguez en el costado, posición en la que el gallego no puede ofrecer su mejor versión. Aunque el de Betanzos es todo voluntad y trabajo, lo cierto es que su rendimiento aumenta de forma exponencial cuando juega mucho más centrado. Ahí es donde hace daño, con circulación de balón y posibilidad de disparo desde la frontal. Laterales, hombres de banda, jugadores del centro del campo y definir el problema con Budimir. Pero todo pasa por liberar plantel y ajustar la plantilla.