El Mallorca B ha dado el pistoletazo de salida a su pretemporada con varias caras nuevas y, entre ellas, destaca la de Alejandro Torres ?Chando?, que será el ayudante de Julián Robles en la temporada 2019-20 en la que el filial bermellón peleará por el ascenso a Segunda B.
Tras caer en la final por el ascenso a la categoría de bronce ante Las Rozas, el Mallorca B abre un nuevo desafío en el que se ha enrolado el que fuera jugador tanto del conjunto bermellón como del Atlético Baleares, Chando, que colgó las botas como blanquiazul y trabajó durante unos meses para la entidad que preside Ingo Volckmann.
Ahora Chando, que compartió vestuario multitud de temporadas con Julián Robles tanto en las categorías inferiores del Real Mallorca como en el propio filial, con el que debutó con 15 años, diez meses y un día en Segunda B, es uno de los nuevos rostros de un equipo que mantiene el bloque del pasado curso y que por el momento ha incorporado al guardameta Jesús Ruiz; al mediocentro Óscar Coll; Fode, jugador de banda izquierda; y el punta Carles Gilbert.
El Mallorca B, que será uno de los tres filiales de la categoría junto al San Rafael y el Santanyí, partirá como uno de los grandes favoritos a dominar el grupo balear de Tercera División tras terminar la liga en segunda posición la temporada pasada. El filial será el referente en la carrera por las posiciones de privilegio en la que se las tendrá que ver, entre otros, con el Ibiza o el ambicioso proyecto que ha vuelto a forjar el Poblense. El Formentera también será uno de los equipos que entrarán en una puja por las cuatro primeras posiciones en la que también se espera, entre otros al Platges de Calvià.