Por primera vez en muchos meses, el Real Mallorca abrirá una jornada frente a un cruce de caminos. Tras casi treinta semanas volando por encima del radar, el conjunto balear debe elegir qué dirección toma y pelear por seguir enganchado a un grupo de equipos que ya no espera a nadie. Estacionado a cinco puntos de los puestos de promoción y con un rival directo esperándole en casa, el equipo de Vicente Moreno está obligado a dar otro acelerón si no quiere que el sueño del playoff se difumine más de la cuenta y acabe perdiéndose en el horizonte. Este sábado le tomará la temperatura un Oviedo al que ya detuvo en la Copa, pero que aterriza ahora en Palma mientras disfruta de uno de los mejores momentos del año y compartiendo sus mismas necesidades (Son Moix, LaLiga 123 TV, 16.00 horas).
En el vestuario del Mallorca entienden que se trata de una cita fundamental para no perder el hilo que va dejando a su paso el pelotón de cabeza, al tiempo que se dibujan en la tabla las primeras grietas serias. El empate de la semana pasada ante el Elche (1-1) no solo redujo la marcha del equipo en su estadio, donde venía de coser una hilera de cuatro victorias consecutivas que le mantenían a la sombra de los mejores, sino que lo alejó un poco más de una sexta plaza que empieza a tener un precio altísimo. Entre sus pies y la línea roja que marca el acceso a la zona más exclusiva de la clasificación ya se han colado el Almería y el propio Oviedo, por lo que un nuevo tropiezo podría dejarle a casi tres partidos de distancia de esa meta con la que ha fantaseado, sin levantar demasiado la voz, desde que regresó a la pasarela del fútbol profesional.
Para el partido de hoy, en el que también quedará definido el golaverage directo con respecto al Oviedo —el Carlos Tartiere alumbró un empate en la primera vuelta (1-1)—, Vicente Moreno tiene la baja de Marc Pedraza, sancionado por acumulación de amonestaciones. Su lugar en la sala de máquinas, en principio, lo ocupará Baba, que debería tener por delante a Salva Sevilla y Dani Rodríguez. En cualquier caso, el técnico no descarta introducir otros ajustes en el once para contrarrestar los planes de Anquela y limitar un planteamiento que ha metido de lleno a los asturianos en la subasta del playoff. A su vez, el técnico del Mallorca recupera a Pervis Estupiñán para el carril izquierdo de la defensa y deberá decidir con qué laterales cuenta para el partido en ambos flancos, ya que tiene a los cuatro disponibles y es poco probable que todos tengan sitio en la convocatoria.
El Oviedo afronta una nueva salida tras el empate contra el Lugo (1-1) de la semana pasada. Para olvidar ese pequeño frenazo, el cuadro carbayón aspira a atrapar los tres puntos en Mallorca, donde solo ha ganado una vez en toda su historia.
Juan Antonio Anquela no podrá contar con Carlos Martínez (lesionado), aunque el jienense también recupera a una figura fundamental para el centro del campo, el catalán Ramón Folch, que regresa a la lista después de un partido de sanción.
En principio, el dibujo no variará demasiado con respecto a las últimas jornadas, en las que, aunque ha probado cambiar durante el partido a una defensa de cuatro, siempre ha salido de inicio con tres centrales y carrileros en las orillas. Para la escuadra asturiana también es un partido marcado en rojo.
A por el décimo triunfo en casa
El Mallorca persigue este sábado la que sería su décima victoria de la temporada como local, una marca que por el momento solo ha superado Osasuna (12). Hasta ahora el conjunto bermellón ha derrotado en su centro de operaciones al propio conjunto navarro, a Cádiz, Tenerife, Córdoba, Numancia, Nàstic, Deportivo, Alcorcón y Lugo.
Tercer encontronazo
El Mallorca y el Oviedo ya se vieron las caras en Son Moix el pasado mes de septiembre, con la Copa del Rey como telón de fondo. Decidió un gol de Giner (1-0).
Racha en Son Moix
Desde que le superó el Málaga (1-2), el Mallorca enlaza tres meses sin perder en su estadio. Aparte de los andaluces, solo le ha ganado el Albacete (1-3).