El Real Mallorca regresa hoy a la Copa, una competición que históricamente ha dado grandes noches. Sin embargo, de un tiempo a esta parte y concretamente los últimos cinco años ha caído siempre en primera ronda, salvo hace dos que quedó apeado en la segunda. Esos años negros se trasladaron también a la competición del KO, pero ahora la situación es diferente.
Existe una corriente de positivismo que lo innunda todo, sobre todo a dos de los sectores más importantes; el vestuario y la afición y cuando esto sucede, la ilusión prevalece en cada partido, aunque sea de segunda ronda de Copa y en un horario extraño (18:45 horas).
El rival es el Real Oviedo, un histórico del fútbol español que al igual que los bermellones lleva años tratando de recuperar su espacio en la máxima categoría.