A finales de octubre de 2001, hace más de tres lustros, un chaval de 19 años desfilaba por primera vez por la pasarela de la Segunda División B. Tomeu Llompart le situó como lateral derecho en aquel duelo ante el San Fernando disputado en el Lluís Sitjar. Aquel adolescente con cara aniñada era Francisco Javier Campos Coll (Binissalem, 1982) el actual capitán del Mallorca y que el próximo domingo cruzará el umbral de los elegidos.
Xisco se convertirá en el quinto jugador en la historia del fútbol mallorquín que alcance la mágica cifra de 500 partidos de Liga entre Primera, Segunda y Segunda B. Cinco centenares de batallas repartidas entre la máxima categoría (2 partidos), la división de plata (155) y la de bronce (342 hasta el momento). Campos derribará una puerta histórica a lo grande. Con el brazalete de capitán y como el único jugador de la actual plantilla mallorquinista que no se ha perdido ninguno de los veinte partidos disputados hasta lo que llevamos de campeonato.
Inicios
Fijo en el Mallorca B, Xisco Campos vivió una fugaz aparición por el vestuario del primer equipo. Héctor Cúper le dio la alternativa en Primera División en un partido ante el Atlético de Madrid el 14 de noviembre de 2004. El mallorquín entró al campo por Cortés en el minuto 61 de un choque que acabó en empate (1-1). Dos meses después, también en casa y ante el Deportivo (2-2) disfrutó de otros minutos al sustituir a Tuni en el minuto 78. El descenso del equipo nodriza bermellón le abrió las puertas de salida al finalizar aquella campaña.
Una década fuera de casa
El jugador de Binissalem inició un periplo de más de una década lejos de la Isla. El Levante B fue su primera parada y tras dos campañas, se marchó al Ecija. La buena temporada le abrió las puertas de Segunda División A por primera vez en su carrera y no dudó en aceptar la oferta del Real Murcia. Al término de esa campaña, Xisco aceptó la oferta del Castellón, también en la categoría de plata. En el verano de 2010 aceptó la oferta del Nàstic de Tarragona, el equipo cuya camiseta ha defendido en más ocasiones (202 encuentros). Xisco Campos se convirtió en un futbolista capital en el conjunto catalán. Después de dos campañas en Segunda, vivió de nuevo el descenso para celebrar el retorno al fútbol profesional en la temporada 2014-15 de la mano de Vicente Moreno, tras el intento frustrado en el playoff de ascenso la campaña anterior. Incluso saboreó una liguilla de ascenso a Primera antes de cerrar su etapa en el Nàstic e irse a Ponferrada. Tras una campaña allí, este verano regresó a Mallorca.
Xisco Campos ha regresado con fuerza. Dieciséis años después de militar en la misma categoría con el filial, el de Binissalem se ha asentado de tal manera en la pizarra de Vicente Moreno que es el único jugador de la plantilla que ha intervenido en los veinte partidos, en diecinueve de ellos como titular. El domingo, ante la Peña Deportiva, alcanzará los 500 partidos de Liga.