El Mallorca debe afrontar este miércoles el encuentro ante el Hércules de Alicante sin uno de sus jugadores más en forma, el catalán Alex López. Autor de cuatro goles, el futbolista procedente del Nàstic está atravesando por un dulce momento de forma, pero la tarjeta que vio en Formentera, la quinta en su cuenta particular, obligará al delantero a descansar ante el conjunto herculano. Empezó la temporada sin ser titular, pero con el paso de los partidos se ha convertido en un fijo para Vicente Moreno tanto por sus goles como también por su aportación al juego colectivo.
Sin duda se trata de uno de los aciertos de la dirección deportiva este verano y su rendimiento está convenciendo a todos. Ahora, al menos ante el Hércules, el equipo rojillo deberá aprender a vivir sin él y ha encontrar nuevas vías de escape y de llegada hasta el área rival. Autor de dos goles ante el Llagostera, otro ante el Ebro y el último en Sant Francesc, el jugador también ha visto cartulinas amarillas casi con la misma rapidez que ha marcado los goles. Sin ir más lejos estos últimos cinco partidos ha visto una tarjeta amarilla por encuentro, lo que sin duda es un factor que debe tratar de corregir para evitar salir del equipo como sucederá este miercoles día uno.
Sin Alex López, el técnico tiene variantes para poder sustituirle. Una de ellas alinear a Cedric o incluso forzar un poco la opción de Salva Sevilla, que pasaría a jugar más adelantado o echar mano de Fernando Cano.
Son alternativas que no terminan de ser ninguna de ellas igual de perfectas que la dupla que forman Abdón y Alex, pero se trata también de buenos futbolistas y que en cualquier momento pueden darle al equipo goles y juego en la zona ofensiva. Sin embargo, este Mallorca si algo tiene es fondo de armario y capacidad resolutiva y ahí están los resultados y las actuaciones del equipo balear esta temporada.
Invicto
El equipo balear todavía no ha perdido esta temporada y solo se ha dejado cuatro puntos, dos ante el Atlètic Balears y dos ante el Formentera, lo demás todo son victorias. Esta circunstancia despierta la admiración del resto de fútbol de Segunda B y a la vez el respeto de los rivales.
Sin ir más lejos en Son Moix el Mallorca no ha cedido ningún punto, pese a que en algunos de los encuentros sí ha sufrido y mucho. Ahora tendrá un examen de nivel ante un Hércules que va de menos a más y que, al igual que el conjunto balear, es un equipo que no hace mucho estaba instalado en la élite del fútbol español y que con el paso de las temporadas ha ido hacia abajo. Este miércoles ante el Hércules y el domingo contra el Valencia, hay seis puntos en juego en total que de sumarse puede seguir catapultando al equipo hacia lo más alto de la clasificación.