Fernando Vázquez continúa en la búsqueda de para salir de la mala situación que se encuentra el Mallorca en la tabla desde que se inició el campeonato.
El técnico gallego está meditando la posibilidad de cambiar otra vez de sistema y apostar por un 4-4-2 en rombo para medirse el próximo domingo, a las 20.00 horas, al Girona en el estadio de Son Moix.
Lejos de atrincherarse atrás, Vázquez confía en su idea y de hecho apostará por un sistema que afianzará esa propuesta ofensiva. Según ensayó este jueves a puerta cerrada en Son Moix, tiene previsto alinear a dos delanteros por primera vez en el torneo doméstico, una fórmula que en la Copa desembocó en la única victoria balear en lo que llevamos de curso. En un agónico triunfo ante el Reus gracias al tanto de Brandon Thomas en la prórroga.
La presencia Brandon Thomas acompañando a Óscar Díaz como dupla ofensiva se perfila como la gran novedad del once inicial para intentar destapar el casillero de las victorias en la Liga y abandonar el farolillo rojo de la clasificación.
No será hasta el entrenamiento de este viernes cuando el preparador gallego despeje las incógnitas que todavía planean sobre el dibujo -aunque se da por hecho que jugará con dos delanteros- y los actores principales del próximo duelo. De hecho, con la portería y la defensa bien definida, el baile apunta a la sala de máquinas.