Pep Lluís Martí ejerció de capitán y exhibió galones en una situación de crisis global, donde ni lo deportivo ni lo institucional atraviesan por su mejor momento. El futbolista, que debido a su experiencia ha vivido todas las situaciones imaginables en el mundo del fútbol, admitió el hartazgo de la plantilla respecto a los continuos conflictos creados entre los miembros del consejo y apuntó que su deseo es centrarse solo en el aspecto deportivo y eso sí, pidió que todos los que de una forma u otra están vinculados al club, desde dentro o desde fuera, «quieran al Mallorca, como un padre quiere a un hijo».
Fue un discurso institucional, que se inició con las cuestiones más punzantes relacionados con la dimisión de Serra Ferrer como director deportivo. El hecho de que ahora este cargo lo ocupe Toni Prats, disminuye el golpe. «Serra nos ha contado lo que ha sucedido y somos conscientes de la realidad del club. Habló con nosotros y aceptamos cualquier circunstancia. Somos jugadores y nos debemos al club y debemos respetar todas las decisiones que se produzcan», indicó Martí.
Comportamiento
El capitán elogió el comportamiento de José Luis Oltra en esta crisis. Pocos entrenadores han sufrido una humillación personal y profesional tan acentuada como la que ha experimentado el entrenador valenciano y ayer Martí salió en su defensa. «Tenemos un entrenador con una personalidad extraordinaria, que tiene una plantilla que se adapta a todas las circunstancias», comentó el capitán. Martí dijo que tanto él como también el entrenador han realizado un verdadero «máster» de cómo afrontar crisis de primer nivel. «Hacemos un máster en todos los aspectos que rodean al fútbol y eso es la ventaja que tenemos, que sabemos afrontar todas las circunstancias que se van presentado. Vamos a esforzarnos al máximo como hemos hecho en el entrenamiento de esta mañana para ir a Anduva en las mejores condiciones y sacar los tres puntos», manifestó el capitán del Mallorca.
Los futbolistas ya saben que José Luis Oltra estará sentado en el banquillo ante el Mirandés y ayer les expresó su confianza en la plantilla y el futbolista admitió también que ellos tienen a su vez esa misma confianza en el trabajo del técnico. «Los resultados no son lo bueno que pensábamos y todos esperábamos estar en otra situación, pero esta es la que es y hay que sacarlo adelante», comentó Pep Lluís Martí.
En el Mallorca los problemas institucionales nacen, crecen, se reproducen y lejos de morir se van doblegando una y otra vez hasta hacerse interminable. Es muy difícil aprender a convivir con ello y la plantilla, en voz de su capitán, admitió que están «cansados» de todo lo que están viviendo. «Estamos cansados de la situación que se vive porque no se habla del partido contra el Mirandés, se habla de otras cosas y nosotros somos profesionales, pero hay otras personas, aficionados, socios, gente que ha vivido mucha cosas y que por encima de todo quiere al Mallorca y el club está por encima de todo, de todas las personas, entrenadores, jugadores, todos...A los mallorquinistas nos interesa que el equipo esté en Primera División, no nos interesa quien manda o quien deja de hacerlo, quien juega o quien no lo hace. Queremos que la afición disfrute de su equipo y que este milite en Primera, que es donde se merece estar. A partir de aquí hay gente que sufre mucho y los primeros somos los jugadores, porque yo lo veo. Esto no es bueno para nadie y lo que tenemos que hacer es entrenar al máximo y el sábado darlo todo para conseguir los tres puntos», declaró Pep Lluís Martí. A título individual, el capitán expresó un deseo personal ante tanta situación de crisis institucional.
Un sentimiento
«Lo que yo deseo es que se ame al Mallorca, que se quiera a este club. Hay gente que quiere al Mallorca y lo demuestra y esto es lo que queremos. Personalmente he vivido cómo ha caído un foso en el Sitjar y muchos lloramos por eso y hemos llorado porque fuimos a Vallecas y subimos y porque en Valencia perdimos la Copa en los penaltis. Esto no se olvida, es un sentimiento, es como la familia. Tenemos riñas con nuestros hermanos, con nuestros hijos, con nuestros padres, nos podemos pelear, pero nunca les dejamos de querer y al Mallorca no hay que dejarlo de querer nunca. Todos somos la familia del Mallorca y entre todos nos queda sacar este adelante y necesitamos de todos, que nadie se quede fuera, porque si alguien no está, no lo conseguiremos. Lo que queremos es que se quiera al club. Todos los que están aquí quieren al Mallorca y todos quieren que esto salga adelante», manifestó el capitán.
«A lo mallorquinistas nos interesa que el equipo esté en Primera División y no quién manda o quién deja de hacerlo»
Martí, sobre la necesidad de centrarse en temas de fútbol