Joaquín Caparrós desfiló por las entrañas del Ciutat de València con la crisis reflejada en el rostro. El entrenador del Mallorca no ocultó su estado de ánimo y ofreció una rueda de prensa con más sangre que análisis. El técnico utrerano se mostró caliente ante los medios de comunicación, aunque quiso aclarar que ni él ni el equipo «estamos muertos». «Me tienen que pegar un tiro, vaciar el cargador y aún así resucito», indicó el preparador bermellón.
Capa
reconoció que su equipo no tuvo «alma» y que entregó las armas después de encajar el primer gol al filo del descanso: «Nos han metido el primero y parece que se acabó todo. No nos pueden meter ese gol. Trabajamos mucho para que eso no ocurra, pero nos hicieron añicos. Nos ha faltado ese convencimiento y sobre todo alma», señaló el técnico, que habló de las urgencias: «Tenemos que mejorar ya. Todos debemos cambiar de actitud para romper esta dinámica y solo nosotros podemos sacar adelante esta situación. Hay que saber competir y demostrar que no estamos muertos».
En cuanto a la pésima racha que suma el conjunto, con 2 puntos sobre 30 posibles, señaló: «Teníamos ilusión, pero el equipo acusó en exceso el primer gol. Tenemos que dar todos el máximo de lo que tengamos». Al respecto de los errores defensivos, se mostró tajante: «Debemos ser más fuertes defensivamente y, a partir de ahí, las ocasiones llegaran. No podemos dar las facilidades que damos en defensa. Tampoco nos pueden meter el 2-0 porque dar esos regalos a nivel defensivo nos está costando los partidos».
Entonces, Caparrós habló de su fuerza interior: «Aunque me maten, aunque esté muerto me tienen que vaciar el cargador y aún así resucito. Este equipo está vivo. Ni me han matado ni estoy muerto. Me falta el último disparo y después el cargador. Imagínate si tenemos todavía opciones», señaló. «El equipo está vivo, lo vamos a dar todo y estamos convencidos de que lo vamos a sacar adelante. Pero llevamos mucho tiempo diciendo esto a los aficionados y ahora no queda otra que preparar ya el siguiente partido», indicó.
Caparrós mostró su lado más oscuro cuando, en lugar de analizar las causas de la crisis, apostó por encararse con Paco Muñoz, de Onda Cero Mallorca, cuando éste le preguntó la remontada que experimentó el equipo en la temporada 2008-09 cuando se produjo un cambio en el consejo de administración: «Eso son chorradas y, entre todos, lo que debemos hacer es sumar. Todos, repito todos, queremos salir de esta situación y desde los medios debéis apoyar porque a todos nos interesa salir de esto», manifestó.
El técnico utrerano insistió en apoyar a Jaume Cladera. «Estamos todos unidos. Tenemos un presidente que ha estado aquí para apoyarnos y, por lo tanto, vamos a intentar sumar todos. Vamos a dar la sangre que aún tengamos. Hemos sido un equipo sin alma y debemos recuperarla. Tenemos que hacerlo ya porque así lo exige la clasificación. Que sumemos por el bien del Mallorca. Los jugadores pasan, los entrenadores pasan, pero la institución permanece y desde los medios tenéis que apretar».