Noche de estreno. El Real Mallorca se mide al Espanyol en la pimera jornada de Liga en un partido que empieza hoy (23:00 horas) y que terminará cerca de la una de la madrugada. Un despropósito que restará seguro mucha afluencia de público al estadio de Son Moix. 98 días después de terminar la Liga ante el Real Madrid en el Bernabéu, el equipo balear vuelve a escena con una plantilla en construcción y sin que Serra Ferrer haya podido entregar a su técnico los tres fichajes que el pasado sábado tenía «apalabrados», y que hoy no estarán en el césped. Tal vez alguno comparezca por la grada, pero Caparrós habría querido tenerlo de corto o al menos poder disponer de él a modo de alternativa.
Pero no ha sido así y mientras Serra Ferrer y Jaume Cladera se agarran a los flecos y a problemas variopintos para tratar de explicar el retraso en los fichajes, lo cierto es que esta noche su entrenador tendrá que situar a un central que viene de estar lesionado como Nunes y a un lateral como Bigas, al que se le dará una enorme responsabilidad. Caparrós juega un partido «con balas de verdad» y sin red protectora. Si llegas al otro extremo de la cuerda todo es muy bonito y si caes nadie te salva. Nadie. Caparrós lo sabe y por eso se apresuró el sábado a anunciar que el equipo no estaba preparado y que confiaba en la promesa de Serra de que reforzaría al grupò esta misma semana. Pero los que no están no solucionarán ningún problema y el entrenador andaluz se aferra a su plantilla actual para intentar empezar con buen pie esta temporada. Físicamente el equipo está muy entero, pero futbolísticamente queda todavía trabajo por delante, aunque también es cierto que estos detalles se pulen más en competición que en pretemporada.
Caparrós ha aleccionado a sus futbolistas durante la semana y previsiblemente ante el Espanyol sí se meterá la marcha que faltó en el Ciutat de Palma. No son partidos comparables, ni en sensanciones ni en responsabilidad. Hoy va en serio y hay que salir a convencer desde el primer minuto de partido. Javi Márquez y Antonio López serán los fichajes de este verano que estarán presentes en el once titular. No estará Arizmendi, lesionado en pretemporada y que no ha llegado a tiempo a este inicio de la temporada. Caparrós quiere que las dudas del domingo se conviertan en certezas y que no se eche de menos a los que no están. De lo contrario, el técnico se acordará hoy del palco.