La buena noticia en esta pretemporada es que Joaquín Caparrós ha tomado la batuta en capítulo de fichajes y ha guiado a Serra Ferrer en la elaboración de la plantilla. Las contrataciones, al menos hasta la fecha, son ‘made in Capa', llevan su sello, y el de Utrera confía en que se mantenga esta línea y se pueda llegar prácticamente al cien por cien de sus deseos.
Hasta la fecha son cuatro las incorporaciones que ha llevado a cabo el Real Mallorca: un portero, Rubén Miño —que será cedido en caso de que Calatayud no continúe—; Antonio López, lateral izquierdo; Javi Márquez, centrocampista y Javier Arizmendi, un futbolista de claro talante ofensivo y que puede desarrollar diferentes funciones en la zona más adelantada del campo. Pero ahí no se acaba el número de incorporaciones que pretende hacer Joaquín y la plantilla dista mucho de ser la que el uno de septiembre quedará ya cerrada hasta que en enero se reanude de nuevo el mercado de fichajes de invierno. Pero durante esta pretemporada y a ser posible antes de que la Liga arranque a mediados de agosto, el entrenador espera poder contar con otro central más o incluso con dos si se confirma la marcha de Iván Ramis al fútbol inglés. También el entrenador quiere que el club le fiche a un nuevo delantero, entendiendo que el mercado no ofrece excesivas facilidades, pero confía en arrancar la campaña con un futbolista que pueda garantizarle un número de goles que puedan garantizar un tránsito más o menos calmado por la Primera División.
En la hoja de ruta de Caparrós también está la de seguir de cerca a los futbolistas del filial, incluso ayer el propio técnico no descartó que uno de ellos o más de uno puedan consolidarse como futbolistas del primer equipo, «porque siempre suele haber una revelación en este sentido», subrayó el entrenador del Mallorca.
Muy a pesar de los deseos de Caparrós, todo indica que puede entrarse en una situación de ‘impás' a la espera de saber qué ocurre con dos futbolistas fundamentales en el esquema del Mallorca como son Iván Ramis y Michael Pereira. El primero ha manifestado su deseo de irse a la Premier League, pero Serra no parece dispuesto a facilitarle la marcha si no es previo pago de seis millones de euros. En el caso del francés, la situación sigue tensándose y su continuidad hoy por hoy tampoco es segura.