Joaquín Caparrós será el entrenador del Real Mallorca para la temporada 2012-13. El anuncio de su renovación será oficial una vez que el técnico estampe su firma en el contrato que ayer ultimaron el máximo accionista de la SAD balear, Llorenç Serra Ferrer, y el abogado del entrenador, Eduardo Ipiens, una situación que podría producirse en un plazo máximo de 48 horas.
La planta noble, que advierte en 'Capa' el perfil idóneo para el proyecto bemellón por su trabajo con la cantera y su carácter competitivo, coloca la primera piedra del futuro curso. La renovación de Caparrós se había convertido en la prioridad del club para desarrollar la planificación deportiva a la mayor brevedad posible. Desde la SAD balear se intuía desde hace días la predisposición del técnico y las negociaciones llegaron a buen puerto justo antes de que el equipo juegue un amistoso en Eivissa antes de marcharse de vacaciones.
Conversaciones
Las conversaciones entre el club y el representante legal de Joaquín Caparrós cristalizaron ayer tras una larga sesión vespertina que prácticamente coincidió con el anuncio de la continuidad de Míchel al frente del Sevilla, donde el renovado preparador mallorquinista había sido aclamado por la afición del Sánchez Pizjuán. Alrededor de las 20.00 horas José María del Nido anunciaba la continuidad del exmadridista al frente del equipo de Nervión y apenas dos horas más tarde era la mano derecha de Caparrós, Luciano Martín, el que desvelaba a través de las redes sociales el acuerdo con el Real Mallorca.
Los cantos de sirena del club hispalense habían resonado con insistencia y la continuidad de Míchel cerró una puerta que seguía muy atento Joaquín Caparrós, que optaba a regresar a la que considera su casa e incluso apuntaba Sevilla, donde finalmente Pellegrino asumió el mando que ocupaba Unai Emery.
Caparrós llegó al Mallorca en la jornada 8 en octubre de 2011 en sustitución de Miquel Àngel Nadal, que dirigió al equipo tras el cese de Laudrup. El andaluz, que cumplió con nota el objetivo del club, firmó junto a su equipo de trabajo hasta el final de la temporada 2010-11 en una operación que rondó los 1,8 millones.