Pau Cendrós y Gonzalo Castro, indiscutibles en el actual Mallorca de Caparrós, no han recibido ninguna propuesta de renovación del club balear, pese a que finalizan contrato el próximo 30 de junio y, desde el pasado domingo, están libres para firmar con cualquier club que deseen. Esta situación afecta también a los otros futbolistas que concluyen su vinculación con la entidad a final de la presente temporada, como Martí Crespí o Pep Lluís Martí, aunque sorprende más el caso tanto del lateral mallorquín como del interior uruguayo al ser dos jugadores titulares.
Con el comienzo del nuevo año es hora de escrutar el mercado y, sobre todo, de asegurar a los jugadores que quedan libres al término de la temporada. En las últimas campañas, la entidad balear siempre había dado el primer paso o bien para le renovación de los jugadores que quedaban libres o bien para sacar tajada por ellos. En esta ocasión, sin embargo, no parece que vaya a suceder ni una cosa ni la otra.
Después de un inicio de Liga titubeante, Pau Cendrós aprovechó al máximo la lesión de Zuiverloon para apoderarse del lateral derecho. De hecho, desde la llegada de Joaquín Caparrós, se ha convertido en un jugador imprescindible y llama la atención que, a seis meses para la finalización de su contrato, nadie del club balear se haya dirigido a su representante para negociar una posible renovación.
Cendrós considera al Mallorca como la primera opción, aunque es evidente que tampoco apurará hasta el final del curso para tomar una decisión. Su regularidad con el equipo en la Liga ha llamado la atención de varios conjuntos no sólo de ámbito nacional, sino también del extranjero, y a buen seguro que no le faltarán ofertas.
El caso de Gonzalo Castro también llama la atención. Considerado uno de los futbolistas más cotizados de la actual plantilla, el Mallorca intentó desprenderse de él en el mercado invernal de la pasada temporada, pero al final se quedó. Ahora, salvo que el club le plantee una oferta de renovación, el Chori se irá en junio con la carta de libertad y sin dejar ni un solo euro en las maltrechas arcas de la entidad...