Mallorca 0 - 1 Málaga
Mallorca: Aouate; Zuiverloon, Chico, Ramis, Cáceres; Alfaro (Aki, min. 46), Tissone, Pina, Tejera (Pereira, min. 71) Nsue; Hemed (Víctor, 56)
Málaga: Caballero; Gámez, Demichelis, Mathijsen, Eliseu; Joaquín, Toulalan, Duda (Seba, min. 80), Cazorla; Baptista (Maresca, min. 65), Van Nistelrooy (Rondón, min, 71)
Gol: 0-1, min. 39: Demichelis marca con la ayuda involuntaria de Pablo Cáceres.
Àrbitro: Miguel Àngel Pérez Lasa (comité vasco). Amonestó a Cáceres, Chico, Toulalan. Anuló un gol a Rondón por fuera de juego (min. 74).
La Liga está amaneciendo, pero el Mallorca ya divisa un horizonte plagado de nubarrones. Un camino repleto de espinas. Apenas han transcurrido tres partidos, pero la hinchada (cada vez más escasa) ya se muestra indiferente. No se ha cruzado ni el primer mes del curso, pero la sensación es que el equipo y el club hacen aguas por todos lados. Al Málaga le bastó con jugar al ralentí y aprovechar otro error de marcaje en una acción a balón parado para aplicar la ley del mínimo esfuerzo y facturar los tres puntos sin un rasguño en el rostro.
Más allá de encadenar dos derrotas consecutivas; de disparar con balas de fogueo y de transmitir una alarma sensación de inferioridad en la cara del enemigo, el grupo balear desprende un aroma preocupante. Huérfano de talento, sin dientes en ataque y con un grave problema en la creación, ya hay quien divisa el mercado invernal como la única solución posible... Así de cruel. Así de real.
Laudrup retiró a Joao Victor para darle la alternativa como titular a Tissone. El ítaloargentino confirmó que es más obrero que arquitecto, un clon de Martí pero con un fútbol contrapuesto al de De Guzman.
El Mallorca salió a verlas venir, ante un Málaga que convirtió el primer acto en el monólogo. De hecho, todo el encuentro se jugó al ritmo que quiso el conjunto de Pellegrini, que solo cambiaba de marcha cuando merodeaba el área del Mallorca.
Sin forzar la máquina, tumbó el campo al costado de Joaquín y el gaditano se divirtió con Cáceres. En la primera, le envió un pase al hueco a Van Nistelrooy que el holandés, medio en el suelo, remató a la cruceta del larguero. En la segundo, bombeó el cuero al segundo palo, donde Cazorla empalmó y Aouate taponó sobre la misma línea.
Al Mallorca cada vez le duraba menos el balón ante un enemigo que, sin hacer nada del otro mundo, ya miraba a los ojos de la victoria. El gol se veía venir, aunque llegó de la forma más inesperada. Falta frontal, despiste en el marcaje, remate sin oposición de Demichelis que Pablo Cáceres, en su intento de despeje, introdujo en su portería (min. 39).
Laudrup retiró a Alfaro en el descanso -su único remate acabó casi... en saque de banda-, y a Hemed a la hora para dar entrada a Aki y Víctor. El japonés hizo daño por la izquierda -suyo fue el único disparo a puerta- y el mallorquín lo intentó, aunque jugó demasiado escorado. Nsue, demasiado adelantado, tampoco encontró portería Y para atascar mas la zona, apareció Pereira por un desaparecido Tejera... Y es que, si no hay instinto asesino, no hay. Por muchos delanteros -7 según el director deportivo- que convivan en el vestuario...
El Málaga seguía a su aire. Se tumbó en la hamaca y disfrutó. Aouate evitó algún gol, Rondón marcó otro que fue mal anulado y Joaquín hizo de las suyas. Tres partidos y el Mallorca ya agacha la cabeza... Y el martes el Villarreal de Jonathan De Guzman.