El futbolista japonés del Mallorca Akihiro Ienaga ha desplegado hoy una bandera de su país en la sala de prensa del Iberostar Estadio y ha guardado un respetuoso minuto de silencio en memoria de las víctimas de la tragedia en Japón.
Aki, como se le conoce en la capital balear, compareció con gesto serio y compungido por la magnitud de la crítica situación que vive su país.
«No tengo muchas noticias, pero mis familiares y amigos están fuera de peligro. Hay muchos desaparecidos y eso es lo que me preocupa. La situación es muy grave, muy peligrosa», ha comentado.
También respondió sobre los temores de un desastre nuclear. «No tengo suficiente información para clasificar el desastre; están tratando de evitar la explosión, están haciendo todo lo posible», ha indicado.
Aki ha recordado que había recibido muchos ánimos antes del partido del domingo pasado ante el Levante.
«Recibí muchas llamadas de amigos.Me dijeron que el hecho de que yo jugara era una alegría dentro de tanta desgracia; esto me motivó mucho».
Y sobre su convocatoria para disputar dos partidos amistosos con Japón, ha señalado que en estos momentos esta cuestión es totalmente secundaria.
«Estamos en un situación muy complicada, ante una situación de vida o muerte es menos importante un partido. Si me convocan iré encantado para dar apoyo al pueblo japonés; si no, esperaré la oportunidad».
El futbolista nipón se refirió, asimismo, al partido del sábado ante el Zaragoza en Palma.
«Sí, estoy preparado y mi trabajo es jugar. Los compañeros y el cuerpo técnico y empleados del club se han preocupado y me han dado ánimos, toda España está con Japón, mi forma de agradecérselo es hacer lo que sé, jugar al fútbol», ha precisado.