Gonzalo Castro se queda... de momento. El máximo accionista del Mallorca, Llorenç Serra Ferrer, cerró anteayer su traspaso a un club ruso por una cantidad cercana a los 4 millones de euros, pero el centrocampista uruguayo optó por rechazar la operación y continuar en la Isla. El Chori seguirá en el club balear, aunque la puerta de salida seguirá abierta para el charrúa hasta mediados de marzo, que es cuando arranca la Russian Premier League.
La historia de este enésimo capítulo del culebrón Castro se escribió en la tarde del sábado. Mientras el Mallorca preparaba su encuentro ante el Sporting, Serra Ferrer se reunió con los emisarios del club ruso para negociar la venta de Castro. Después de varias horas de negociaciones, el vicepresidente cerró el acuerdo por unos cuatro millones de euros. Faltaba el visto bueno del futbolista, que declinó la aventura irse y no rubricó el acuerdo.
Serra acudió por la mañana a la Ciudad Deportiva Antonio Asensio para reunirse con Laudrup y explicarle la situación. El técnico danés, asimismo, charló con Castro a pie de césped. Cabe recordar que el preparador mallorquinista pasó por el fútbol ruso la pasada temporada...
Su negativa al fútbol ruso y el hecho de que no hayan fructificado las negociaciones con diversos clubes de la Liga, a falta de apenas unas horas para que esta noche se cierre el mercado invernal, invitan a pensar en la continuidad de Gonzalo Castro, aunque no se puede asegurar al cien por cien que finalizará la temporada vistiendo la camiseta bermellona.
Las conversaciones mantenidas con su representante Paco Casal desde los albores de este mercado invernal, a finales del pasado mes de diciembre, no han fructificado.
La continuidad de Castro ha sido recibida como la llegada de un refuerzo para el danés. Laudrup no ha ocultado su malestar porque el club haya dejado marchar a Cavenaghi sin haber atado todavía a un delantero.
Desde que se abrió la posibilidad de tramitar licencias, a comienzos del presente mes, el nombre de Castro ha monopolizado todo el mercado. El interés mostrado por varios clubes de la Liga (Atlético, Valencia, Villarreal...) y la imperiosa necesidad de la entidad balear en venderle ahora -acaba contrato el próximo año- acercaron al Chori a la puerta de salida.
Además, hace apenas quince días, el propio Michael Laudrup no lo alineó como titular en el Vicente Calderón porque estaba «prácticamente vendido», aunque finalmente sí que participó en ese encuentro por la lesión tempranera de Víctor Casadesús.
Sin embargo, todo se torció de forma inesperada. La antigua deuda con el Nacional de Montevideo, la falta de entendimiento con Paco Casal y la negativa del jugador a aceptar una oferta del club ruso, le han cerrado las puertas de salida.
Desde que aparecieron todos los rumores sobre su salida, Castro ha sufrido un bajón notable en su rendimiento. El cuerpo técnico confía en que el jugador recupere su rol una vez se confirme su continuidad en el Mallorca... al menos de momento.