Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), ha recibido este martes en Las Rozas a una delegación del Mallorca Palma Futsal tras su conquista de la UEFA Futsal Champions League en un acto al que también ha asistido el presidente de la Federació Balear de Futbol, Pep Sansó.
Rubiales, uno de los principales ausentes en la Final Four que se disputó en el Velòdrom Illes Balears, ha destacado el mérito de lo conseguido por el club de Ciutat en la máxima competición del fútbol sala continental. «Habéis hecho historia y es increíble lo que habéis conseguido», comentaba. «Es la ilusión de un club que ahora sí que es grande. Ha ganado el trofeo más importante del mundo, no hay otro más importante para un club. Hemos ido todos juntos y se ha podido traer aquí. Ha sido fundamental jugar en casa porque hay momentos en los que el jugador siente el calor de la grada», añadía el presidente de la RFEF. «Cuando nos llegó que Polonia podía no albergar la Final Four, recibimos la llamada de Pep Sansó y una carta del club y comenzamos a trabajar. Llamamos, fuimos todos juntos y lo conseguimos».
Por su parte, el director general del Palma Futsal, José Tirado, subrayaba el esfuerzo realizado desde el club para conseguir el primer título que llega a sus vitrinas en casi 25 años de historia. «Cuando todos estamos unidos pueden ocurrir cosas maravillosas», recordaba el dirigente, que ha acudido a Madrid acompañado por el entrenador, Antonio Vadillo, y el capitán de la plantilla, Carlos Barrón.
Antonio Vadillo, hablaba sobre la importancia del apoyo de la afición: «Ha jugado un papel importantísimo para superar las adversidades. Teníamos claro que era nuestro torneo, nuestro partido. Llevábamos muchos meses trabajando bien e intenté inculcar a los jugadores que era nuestro torneo. El secreto del club es el tiempo que se lleva trabajando, cada temporada hemos ido a más, poco a poco hemos entrado en esa mesa con los grandes clubes».
Carlos Barrón afirmaba: «Es lo más bonito que se puede vivir. La muerte del presidente, Miquel Jaume, nos hizo mucho daño, pero el trabajo y el creer nos ha dado mucha fuerza. Lo mejor que podamos hacer Tomaz y yo era levantar el título al cielo para Miquel por todas las finales que habíamos perdido».