Cuando el Barça privó hace un año al Palma Futsal de disputar su primera final por el título de Liga, sin haber sido capaz de ganarle ninguno de los duelos aquel intenso playoff de semifinales, Antonio Vadillo lanzaba un mensaje que puede que su destinatario haya captado doce meses después. «El fútbol sala nos debe una», aseguraba el técnico jerezano, cuyo equipo está a un solo partido, a una victoria de sacarse esa espina, de rebasar una barrera infranqueable para un equipo que regresa por cuarta vez a este escenario, al peldaño previo al duelo por ser campeones de la Primera División.
Eso sí, delante tendrán a quien fuera su verdugo en sus primeras incursiones en las semifinales ligueras (2015 y 2016), un Movistar Inter inmerso en una guerra interna focalizada en el jugador que hizo grande al club madrileño. La ausencia de Ricardinho en el duelo de cuartos ante el Jaén confirmó las intenciones del astro luso, cuya despedida está siendo agria y podría concretarse definitivamente hoy mismo si el Palma es capaz de superar un cruce (12:30 horas, Gol) en el que únicamente le vale la victoria al cuadro balear. Un empate daría el billete para la final al Movistar Inter, que haría valer su condición de líder de la fase regular al estallar la crisis de la COVID-19. Hay mucho en juego. Nada menos que ponerse a un duelo de ser campeones de la Primera
División. Algo más que un objetivo para un Palma Futsal que tiene una cuenta pendiente. Con el Movistar Inter y con las semifimnales. En el caso de la primera, porque los de Tino Pérez han ganado, sufriendo, los tres duelos que les han enfrentado esta temporada: 1-0 en el Jorge Garbajosa, 3-4 en Son Moix y de nuevo 1-0 en el Martín Carpena, en cuartos de final de la Copa de España. La venganza está servida, pues.
Champions
Pero, además, el ganador del primer cruce de semifinales (el otro medirá a Levante y Valdepeñas a las 15:30 horas) tendrá un premio extra: la posibilidad de jugar en Europa la próxima temporada.
Porque este playoff exprés coronará al campeón de Liga, pero también decidirá una o dos plazas para disputar la Champions. Habrá dos plazas -para los finalistas- si ninguno de los dos representantes españoles en el torneo (ElPozo Murcia y Barça) logra ganarla, y en caso de que uno de ellos se proclame campeón continental, el vencedor de esta fase final de la Primera División le acompañará en la competición por excelencia durante la campaña 2020/21.
Muchos son los alicientes que reúne todo un clásico del fútbol sala español. Movistar Inter, el club de referencia, y el Palma Futsal, un proyecto emergente y en constante evolución, han protagonizado decenas de batallas en todos los escenarios posibles. Pero el de hoy será diferente, tal vez único. El empate y el triunfo le valen al conjunto telefónico. A los isleños, únicamente el triunfo les permitirá saldar esa deuda que tiene el fútbol sala con ellos y hacer una vez más historia en su cuarta presencia en semifinales.
Protagonistas
En el Movistar Inter la mala sintonía con Ricardinho es la constante. Eso sí, la calidad de un bloque sólido permitió saldar con nota el choque de cuartos ante el temible Jaén, pero la profundidad de banquillo del Palma, la buena preparación desarrollada por los de Vadillo y la velocidad de crucero alcanzada tras exhibir una enorme autoridad frente a ElPozo (2-3) han elevado exponencialmente las posibilidades de los de Son Moix, liderados por un enorme Vilela en ataque y apoyados en la solidez de su bloque.
Ante un partido y un día para soñar, el destino pone en manos del Palma Futsal la ocasión de acercarse aún más a los anales del deporte balear. Cuarenta minutos y el Movistar Inter es lo que les separa de hacer algo muy grande. Algo inédito.