Fernando Gilet dejará de ser presidente de la Federación Balear de Ciclismo (FCIB). El dirigente, que accedió al cargo tras el fallecimiento de Xavier Bonnín y ha ostentado la dirección de la territorial desde 2017 hasta el presente 2023, anunció su decisión este sábado a la Asamblea, abriéndose así un periodo de transición en la entidad, que finalizará el 31 de julio próximo cuando se haga efectiva la dimisión de Gilet ante su junta directiva.
De esta manera, la FCIB deberá nombrar a un nuevo presidente en funciones hasta la convocatoria de elecciones en año olímpico, 2024, ya bajo los preceptos de la nueva Ley del Deporte Balear. El anuncio causó sorpresa e impacto entre los asambleístas, que conocieron las intenciones de Gilet de no presentarse a la reelección, dando paso a un nuevo dirigente, aunque parece que su equipo de trabajo podría presentar una propuesta para continuar en la territorial cuatro años más.
«De igual modo, quiero pedir disculpas a todas aquellas personas que, por las razones que conlleva cualquier responsabilidad, en alguna ocasión o circunstancia, se hayan visto perjudicadas o molestas por mis decisiones«, añade el todavía presidente, que destaca el haber dejado «una federación unida, más moderna e integrada, saneada económicamente y con más actividad ciclista que nunca», concluye Fernando Gilet.
De esta manera, el vicepresidente de la FCIB, Toni Bauzá, tomará el mando de la territorial interinamente en funciones hasta la convocatoria de elecciones en el año 2024, manteniendo la línea de actuación del equipo que ha formado y encabezado Gilet durante los dos últimos mandatos.