La organización de la prueba ciclodeportiva ‘El Salt de Tramuntana' comunica el aplazamiento de la carrera del 18 de marzo, fecha anunciada inicialmente, al 24 de septiembre, debido a las consecuencias provocadas por el temporal 'Juliette' en el entorno donde debía desarrollarse el evento (el Coll de sa Batalla), que impiden garantizar la plena seguridad de los participantes y del personal de organización, según el informe emitido este martes por la Policía Local de Selva sobre la carretera que va desde Caimari hasta Lluc.
En dicho informe, se justifica en cinco puntos la decisión de informar negativamente sobre la celebración de la prueba. El primero es que el trazado se encuentra cubierto de árboles con las ramas cortadas, en forma de lanza y se podría dar el caso que algún corredor pudiera golpearse. A lo largo de la carrera, hay bastantes ramas a punto de caerse, y podría provocar algún accidente de algún participante. No están disponibles los dos carriles, porque las ramas de los árboles y las piedras se encuentran en ambas partes de la zona asfaltada, cosa que hace que no se puedan utilizar los dos carriles de circulación. Hay zonas del asfalto que presenta grietas y las ruedas de las bicicletas se podrían introducir en ellas, patinar y caer. Además de los participantes, tanto los voluntarios, como organizadores y cuerpos y fuerzas de seguridad podrían verse afectados por alguna caída de ramas o árboles y desembocar en accidentes tanto personales como materiales.
Tras el aplazamiento oficial de la prueba al 24 de septiembre, los inscritos podrán solicitar la devolución de su tasa de inscripción o bien mantenerla hasta la celebración de la carrera en su nueva fecha a través de la página web oficial https://saltdetramuntana.com/.
‘El Salt de Tramuntana' es una nueva cita en el calendario ciclista de la isla que consiste en dar el mayor número de vueltas a un circuito cerrado de 21,4 kilómetros entre Selva, Caimari y el Coll de sa Batalla durante 3,5 horas. La prueba está impulsada por el Ayuntament de Selva, el Consell de Mallorca, a través del Consorcio de Tramuntana Mallorca, y Som Tramuntana, con el objetivo de dinamizar la economía de la zona en temporada baja, y cuenta también con la financiación por la Unión Europea Next Generation EU, el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y la Agencia de Estrategia Turística de las Illes Balears.