La reunión entre el Atlético Baleares y el Voley Palma para que el club de la Vía de Cintura se convirtiera en patrocinador principal ha finalizado sin acuerdo. La incompatibilidad entre uno de los principales 'sponsors' del ATB, que es rival directo del club palmesano en la Superliga de voleibol, y la importante cantidad de dinero que necesita el Voley Palma para poder inscribirse en la máxima categoría (en torno a los 100.000 euros) ha imposibilitado una alianza entre ambas entidades.
La reunión se ha producido este martes entre Guillermo Pisano, director general del ATB, acompañado por Antonio Diéguez, y Carlos García, presidente del Voley Palma. La predisposición entre ambas partes invitaba al optimismo pero finalmente no se pudo sellar ningún acuerdo de colaboración. Al margen del ATB también se sondeó la posibilidad de patrocinar al Voley a través de alguna de las empresas de Ingo Volckmann, el propietario de la SAD blanquiazul, pero el importante desembolso económico frenó la operación.
Este frustrado intentó por salir del túnel supone un varapalo importante para Carlos García, que apenas tiene una semana de plaza para sondear otro esponsor privado que le pueda sacar del atolladero e inyectarle esos 100.000 euros que necesita para formalizar la inscripción.