No pudo elegir mejor día José Linares para hacer realidad un deseo. El regatista mallorquín completó la segunda y última etapa de la Mini Transat EuroChef 2021, o lo que es lo mismo, la travesía náutica al Océano Atlántico, al mismo tiempo que cumplía 44 años de edad. Doble celebración para el deportista del Club Náuitico de Sa Ràpita, que sigue los pasos de su mentor, Hugo Ramón, y une su nombre al de los baleares que han completado una de las pruebas más carismáticas y exigentes de la vela oceánica.
Linares tardó 17 días, 5 horas, 15 minutos y 8 segundos en recorrer las 2.700 millas náuticas que separan La Palma de Sant François, en la caribeña isla de Guadalupe, meta de la Mini Transat 2021. Allí, el mallorquín fue recibido con todos los honores y una tarta con la que festejar su cumpleaños y el hacer conseguido llegar a puerto tras varias semanas de navegación en alta mar, que apenas de saldaron con pocos incidentes, salvo la rotura de una parte del balcón de popa y la ceniza que tuvo que retirar de su embarcación durante la parada técnica en La Palma, a consecuencia de la erupción del volcán que tiene en vilo a la isla canaria.
A las 20:15 horas del lunes -hora española-, Linares culminaba la travesía iniciada el pasado 26 de septiembre en Les Sables d'Olonne (Francia), emblemático escenario de la salida de la Mini Transat EuroChef 2021, desde donde enfrentó las 1.350 millas náuticas que le separaban de La Palma, final de la primera etapa. A bordo del 'Vamos Vamos', embarcación de 6'5 metros y con el dorsal 860, José linares disfrutó de una aventura única, que culminó con éxito acabando en el puesto 32 de la clasificación de los barcos de serie, siendo 23º en la segunda y última etapa.
En total, Linares ha necesitado 29 días, 4 horas, 5 minutos y 58 segundos para unir Les Sables d'Olonne y Sant François (Guadalupe), permitiendo al regatista del Club Náutico de Sa Ràpita firmar otra página de gloria para la vela balear, en este caso la oceánica, además de cumplir un sueño y un objetivo a cuya celebración añadió la de un cumpleaños, el 44, que tardará mucho tiempo en olvidar por la emotividad del momento. De completar la travesía del Atlántico. Un reto al alcance de unos pocos elegidos.